Daniela Ramírez y su última revelación en "Secretos de familia"
La actriz que encarna a Elena afronta el trauma por haber sido abusada por su abuelo. "Es bueno instalar estos temas en la sociedad, que se debatan", señala.
Nicolás Labra G.
Daniela Ramírez lleva, en gran parte, la carga emocional como protagonista de toda la trama que esconde la teleserie nocturna de Canal 13, "Secretos de familia, justicia para Sara", que se transmite de domingo a jueves. Y es que Elena, su personaje, no solo está en conflicto intentando descubrir quién es el responsable de la muerte de su hermana Sara, sino que también carga con un trauma de niñez que abre una nueva perspectiva a su personaje.
Y es que Elena fue abusada por su abuelo Octavio Cruchaga, personaje a cargo de Francisco Reyes. Sobre esta nueva revelación y el giro en la trama, Ramírez aseguró que "este ha sido un personaje súper demandante, creo que el más complejo de toda mi carrera y no sólo porque lleva toda la carga de la historia y se vincula con todos los personajes, sino por todo lo que vive, desde el asesinato de su hermana hasta descubrir que fue abusada dentro de su familia".
En ese sentido, y pese a la carga que tiene su personaje, Ramírez valora cómo se ha dado ese trabajo con Reyes y las difíciles escenas que han debido trabajar, sabiendo ese recuerdo de Elena. "He tenido muchas escenas difíciles en esta teleserie, pero eso es bueno también, implican un gran desafío, y a mí trabajar con Pancho me encanta", asegura.
Además, considera que "he tenido últimas grandes experiencias con él y me declaro enamorada de él. Es alucinante, como actor y como persona, y enfrentarnos en estas escenas sólo potencia nuestro vínculo".
Visibilizar
En ese sentido, la actriz también analizó el impacto de un abuso y cómo ese hecho, considera ella, debe ser visibilizado y puesto más en discusión en la sociedad a partir de la experiencia que ha tenido con su interpretación.
"Puede representar y ayudar a muchas mujeres y personas en general. Es bueno instalar estos temas en la sociedad, que se muestren, que se debatan y que quede claro que no pueden seguir ocurriendo", y añade que "a veces uno sabe con quién está y uno nunca deja de conocer a la gente, porque este tipo de cosas suceden".