Editorial
Avances en la transparencia
El reciente hito alcanzado por el Portal de Transparencia del Estado, al registrar la solicitud de acceso a información pública número dos millones, marca un punto de inflexión en la cultura de transparencia en Chile. Este logro no solo refleja un aumento significativo en el conocimiento y uso de las herramientas de transparencia por parte de la ciudadanía, sino también un cambio cultural hacia una mayor participación ciudadana y vigilancia sobre las acciones del Estado.
El crecimiento exponencial en el uso del portal, que alcanzó el segundo millón de solicitudes en la mitad del tiempo que el primer millón, es un testimonio del compromiso de los chilenos con su derecho a la información. Esta plataforma se ha convertido en un recurso de enorme importancia para acceder a información pública relevante, lo cual es fundamental para garantizar la rendición de cuentas de los organismos públicos y prevenir la corrupción. El acceso a datos sobre políticas, decisiones y gestiones de las autoridades permite a la sociedad civil y los medios de comunicación actuar como contrapesos y fiscalizadores, promoviendo una gestión pública transparente y eficiente.
El Consejo para la Transparencia (CPLT) juega un rol crucial en este proceso, garantizando que los ciudadanos puedan ejercer su derecho a la información. La labor del CPLT es vital para mantener un entorno en el que la opacidad no tenga cabida y donde la información fluya libremente entre el Estado y sus ciudadanos. La transparencia no es solo un derecho, sino una herramienta esencial para construir una sociedad más justa y equitativa. Al exigir transparencia, la sociedad no solo se protege de la corrupción y la malversación de fondos públicos, sino que también fomenta una cultura de integridad y responsabilidad.
Además, e una democracia robusta, la información es poder, de manera que el acceso libre y abierto a la información pública permite a los ciudadanos tomar decisiones informadas, participar activamente en la vida cívica y exigir una gestión pública ética. Sin transparencia, los riesgos de abuso de poder y corrupción aumentan, erosionando la confianza en las instituciones y debilitando la democracia.
"El Portal de Transparencia del Estado llega a dos millones de solicitudes de acceso a información pública".