Mayor respeto a la autoridad

No son pocos quienes creen que legislar sobre el uso de la fuerza para Carabineros y Fuerzas Armadas, es una materia innecesaria. Son los mismos que sostienen que lo ideal es que la comunidad retome el respeto a la autoridad y que entienda que quienes estén encargados del orden público actuarán de acuerdo al poder que se les confiere por ley, sin sobrepasar sus derechos y que ante todo existirán instancias de reclamo si así se necesitaran.

En la otra vereda, hay quienes sostienen que sin un reglamento específico de regulación los carabineros temen que al utilizar medidas extremas sean sumariados, suspendidos, incluso puestos a disposición de tribunales, pese a que su actuar se apegó a un su "buen criterio". Y allí aprueban que si todo queda bien regulado se sabrá de inmediato si su actuar fue o no el correcto.

Tal vez ambas posturas tengan un grado de razón. Antes se entendía fácilmente la labor policial. Cualquier fiscalización partía de la premisa que se debía colaborar y responder a lo requerido, si era sorprendido en la comisión de un delito o se resistía a una aprehensión estaba la posibilidad que se utilizara la fuerza física. También era de conocimiento que si un uniformado desenfundaba un arma podía utilizarla si no se respetaba la orden.

En la actualidad el uso de arma de fuego es casi prohibitivo y desenfundarla no representa un amedrentamiento serio y por ello hemos visto como se suman las agresiones a a los uniformados.

Es cierto que también conocimos de abusos policiales que fueron minando el respeto que existió y hoy son muchos los que no adoptan una posición colaborativa, sino que van con el claro propósito del enfrentamiento a sabiendas que recibirán sanciones menores.

Frente a esa realidad, debemos convenir, lo mejor es que se regule o actualice el uso de la fuerza y se determine el protocolo de cómo utilizarla, desde el trato hasta la necesidad de recurrir a armamento letal. Es el único modo para retomar la paz social que se ha visto alterada en el último tiempo.

Quienes más se aprovechan de este escenario son los delincuentes, quienes saben cómo actuar para impedir controles, muchas veces utilizando a pobladores para impedir los procedimientos.

"quienes más se aprovechan de este escenario son los delincuentes, quienes saben cómo actuar para impedir los controles...".

La captura

La situación de las ISAPREs a propósito del fallo de la Corte Suprema, que ordena devolver cobros excesivos a los cotizantes, es un caso intrigante y en apariencia simple. En breve, la situación es que las ISAPRES cobraron en exceso a sus clientes desde que no ajustaron sus planes a lo instruido en la Circular 343 de 2019. El cobro excesivo podría llegar a US$ 1.400 millones según estimaciones del MINSAL y la cifra equivale a la suma de las ganancias totales del sistema en los últimos 30 años. Las ISAPRES informan que esa deuda es impagable y que, el fallo de la Corte Suprema, implica la quiebra del sistema de salud privado y la transferencia de cerca de 3 millones de beneficiarios a FONASA. Además las ISAPRES le deben a los prestadores médicos una suma cercana a los US$ 400 millones.

Esto no es novedad, sólo el año pasado llegaron a los tribunales 668.000 recursos contra las ISAPRES y más de 170.000 hasta la Corte Suprema. Esto desde hace 20 años.

Un sistema que cobra en exceso durante décadas, que no le paga oportunamente a los proveedores médicos, cuya única defensa es que sus ganancias (cobros indebidos incluidos) no le permiten devolver los excesos y amenaza con abandonar a su suerte a millones de clientes, parece una extorsión al regulador. En Economía se conoce como captura, pues los costos de la quiebra para las ISAPRES son menores que para las autoridades.

Pero habría que preguntarse cómo se llegó a esto y cómo se mantuvo durante tanto tiempo. La respuesta en parte se relaciona con el alza de los costos de la medicina y del gasto que hacen las personas en estos servicios. Las ISAPRES no habrían sido capaces de contener costos y han recurrido hasta al fraude para mantenerse en el negocio.

De hecho, esto también ocurre en FONASA, que atiende más de 15 millones de personas, pero cuyo presupuesto, en casi un 80%, proviene de aporte fiscal, mientras sólo algo más del 20% proviene de las cotizaciones de los afiliados.

Esto es una tendencia en los países desarrollados y sugiere que se requiere una reforma de fondo; es decir, "entrar a picar" como dijo un Ministro de Hacienda.

"los costos de la quiebra para las ISAPRES son menores que para las autoridades".

Fernando Cabrales, Economista

Huevitos de pascua

Ya se viene la Semana Santa y con ello también otro tipo de tradiciones más ligadas al consumo, como la de los huevitos de pascua. En negocios del rubro confitero ya se pueden apreciar las ofertas.

Una necesidad

Muchos peatones en la ciudad concuerdan en la necesidad de semáforos en buen funcionamiento a lo largo de la avenida Diego Portales. Al ser una arteria de la ciudad tan concurrida, está expuesta a posibles accidentes.

Caos vial

Es frecuente ya que varios semáforos en Arica presenten problemas. Es el caso del ubicado en el sector de Brasil con Santa María, en el que los conductores aseguran que "pasa más malo que bueno", generando un caos vial en el lugar.