María José Collado Rojas

El 11 de octubre de 2021, Monserrat Oñate Rocha, originaria de León, Guanajuato, inició un viaje a pie por distintos países de América, llegando esta semana a Arica.

La mujer, de profesión médico pediatra, inició su viaje en Ciudad de México, lugar desde donde salió con un carrito para transportar lo necesario para la odisea, y "muchos sueños por delante", declaró.

El objetivo de la travesía, contó, es llevar un mensaje de salud a través de la caminata. "Es un llamado a que seamos concientes de la importancia del estilo de vida y una lucha contra el sedentarismo. Es importante hablar también de la relación que existe entre la aparición de enfermedades crónicas y metabólicas y el sistema alimentario".

Agregó que detrás de la mala alimentación de los americanos también hay un daño al planeta que se manifiesta en el cambio climático, por lo que es fundamental realizar modificaciones en el estilo de vida.

Después de su paso por la Eterna Primavera, la profesional continuará su caminar hasta llegar a Santiago para terminar con el recorrido por Sudamérica en la capital nacional.

"Después de casi diez meses recorriendo América por el Pacífico, el único país que no atravesé fue El Salvador por un tema de seguridad y el cruce de Panamá y Colombia, ya que la única forma de hacerlo era vía marítima o aérea, por lo que tuve que tomar avión para llegar a Colombia y de ahí comenzar nuevamente el trayecto por Sudamérica para terminarlo en Chile".

Agregó que aquí le esperan grandes retos como atravesar el desierto más árido del mundo, por lo que aprovechó su parada en Arica para prepararse y abastecerse de víveres.

Vuelta al mundo

Monserrat comentó que el proyecto inicial consideraba dar la vuelta al mundo a pie con su mensaje, sin embargo, una vez que llegue a Santiago decidirá si continuará el viaje. "En el corto plazo quiero terminar Sudamérica en unos dos o tres meses, estimo. Cada país ha tenido sus circunstancias sociales y sus retos, pero Chile por las distancias y por su clima es un gran reto para mí, por lo que espero que todo fluya sin ninguna complicación".

Y es que el viaje de la mexicana no ha estado libre de contratiempos. Mencionó que el mayor riesgo lo vive en las carreteras, que no presentan laterales, por lo que hay que andar por el carril de los vehículos. Además, prefiere iniciar sus caminatas en la madrugada para evitar exponerse demasiado al sol. "Hay un riesgo en la seguridad, por ejemplo, en Ecuador sufrí un asalto con arma blanca que no trascendió y en la frontera de Nicaragua y Costa Rica también viví una situación delicada, donde gracias a Migración pude librarlo".

"Es un llamado a que seamos concientes de la importancia del estilo de vida y una lucha contra el sedentarismo".

Monserrat Oñate.

Monserrat comentó que parte del viaje tiene por finalidad adentrarse en los hogares de los distintos países visitados para vivenciar su alimentación local y normalizada. "Me he puesto como conejillo de indias adentrándome a la alimentación habitual y viendo los factores que tienen como causa la obesidad y las enfermedades metabólicas". Además destacó el aprendizaje ganado en la experiencia, conociendo nuevas culturas y saliendo de su zona de confort. "Hay un gran trabajo de fondo, con riesgos a los que una está expuesta. También hay un llamado a las mujeres, que sean más partícipes con iniciativas sociales y que demos más visibilidad de nuestra presencia. Vengo de un país con mucha violencia hacia la mujer, por lo que es una forma de decir 'estoy presente', enfrentando los miedos de un viaje ensolitario", acotó.