Alimentos veganos serían mejores para los perros
Estudio realizado en Inglaterra, y que incluyó a más de 2.500 canes con dueños, sugiere que la comida basada en vegetales resulta más segura y nutritiva que la fabricada a partir de carne.
Rodrigo Castillo
En octubre del año pasado, un estudio realizado por la Universidad de Winchester, en Inglaterra, demostró que la alimentación vegana para perros y gatos era tan saludable como la dieta basada en carnes. Ahora, una nueva investigación llevada a cabo por esa misma entidad sugiere que, al menos en el ámbito de los perros, la comida basada en vegetales resulta más segura y nutritiva que los alimentos tradicionales para mascotas.
El nuevo estudio es el más grande que se ha hecho hasta hoy sobre el tema. Para obtener los datos, se hizo un seguimiento a más de 2.500 canes, a lo largo de todo un año y con la entusiasta participación de los dueños de esos animales. De esa manera se descubrió que l
os regalones alimentados con productos veganos presentaron menos enfermedades comunes y también necesitaron menos visitas al veterinario.
De acuerdo a las cifras recogidas por los investigadores, casi la mitad de los perros alimentados con una dieta basada en la carne tuvieron que tomar medicamentos especiales para dolencias muy específicas. Entre los perros nutridos sobre la base de vegetales, en cambio, sólo un tercio necesitó consumir ese tipo de fármacos veterinarios.
Los hallazgos del equipo académico llegan en momentos en que gran parte de los dueños de mascotas, a nivel mundial, están considerando la posibilidad de cambiar la dieta que le dan a sus perros. Según estudios previos, hay cerca de 470 millones de perros-mascotas en el planeta, y sólo en 2020 la industria de los alimentos veganos facturó ventas de alrededor de 9 mil millones de dólares.
El profesor Andrew Knight, responsable de la investigación, advirtió, eso sí, que los resultados obtenidos en esta ocasión deberán ser confirmados por futuros trabajos. Según admitió, la "limitación clave" del estudio es que se realizó a partir de perros que viven con sus respectivos amos, utilizando datos que los dueños aportaron al responder un cuestionario especializado. Lo ideal, para una mayor precisión científica, sería contar con animales que estuvieran reunidos en un mismo sitio a lo largo de todo el periodo de estudio, con grupos de control y con dietas muy específicas suministradas en forma metódica.
Pese a ello, el académico siente que el estudio, tal como se realizó, en hogares normales y con notas tomadas por gente no especializada, brinda un panorama muy elocuente acerca de los resultados que se pueden observar en el "mundo real" de los perros y su relación con los alimentos.