Natividad Espinoza R.

A dos días de la vuelta oficial a las clases presenciales en colegios, tanto padres como hijos deben tener todavía dudas sobre los protocolos a seguir dentro, pero también fuera de las aulas.

Además de los recreos, uno de los espacios en que los escolares más están al aire libre es durante las horas de educación física, asignatura que estos días ha sido tema de conversación debido a un llamado de la Asociación Chilena de Profesores de Educación Física (Achipef), que busca que sea considerada como prioritaria en este regreso a las aulas.

¿La razón? Las altas cifras de sedentarismo y obesidad vistas en los menores del país. De hecho, según la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb), un 23% de los niños chilenos es actualmente obeso.

Pero, ¿qué pasa con los niños que han tenido covid-19? ¿Se les puede exigir lo mismo que a sus compañeros en educación física?

La infectóloga pediátrica y jefa del Vacunatorio de la Clínica Universidad de Los Andes, María Luz Endeiza, aseguró que "todavía no hay un indicador preciso de que todos los niños que han tenido covid deban hacerse un chequeo específico antes de hacer educación física".

De acuerdo con la doctora, esto se debe a que todavía no hay nada que demuestre un daño cardíaco o pulmonar a largo plazo en niños que han hecho cuadros leves de este coronavirus. No obstante, advirtió que en un futuro esto podría cambiar, ya que "tenemos que recordar que estamos frente a un virus nuevo, que lleva apenas dos años en el mundo".

No obstante, Endeiza advirtió que sí hay niños que deberían volver a hacer actividad física previa emisión de un certificado de un cardiólogo y/o cardiopulmonar que apruebe el ejercicio.

"Estoy de acuerdo en que los niños que han estado hospitalizados por covid más complicado, con neumonía grave y sobre todo los niños que han hecho el Síndrome Inflamatorio Multisistémico (PIMS) necesitan ver a un médico antes de hacer educación física porque alguno de ellos puede haber quedado con secuelas. De hecho, todos los niños que han tenido PIMS se van con control con el cardiólogo con cierta frecuencia, según cómo evolucionaron en la etapa aguda", dijo la médica.

¿hacer diferencias?

De todas maneras, el head coach de Alemana Sport, Eduardo Fuentes, sugirió que los niños o padres comuniquen a los profesores, sobre todo al docente jefe y al de educación física, si es que un menor estuvo contagiado de covid-19.

"Hay que hacer una diferenciación de actividades, una progresión específica dentro de la secuencia de aumento, de mejora de la parte de resistencia y todas las cualidades físicas, fundamentalmente la fuerza y los movimientos preparatorios. Es muy importante que tengamos en cuenta estos detalles para desarrollar y preocuparnos nuevamente del desarrollo físico de nuestros alumnos", destacó Fuentes.

El director de la Escuela de Pedagogía en Educación Física de la Universidad San Sebastián en Santiago, Patricio Arroyo, quien además de profesor es kinesiólogo, coincidió con Fuentes en que es bueno que en los colegios sepan si un niño tuvo el virus, sobre todo en algunos casos.

"La evidencia señala que efectivamente hay que ver qué tipo de situación tuvo el niño con el covid. Por ejemplo, si tuvo síntomas respiratorios, si tuvo que estar en cama hay que tener ciertas precauciones", explicó.

"Está comprobado que hay una disminución de entre el 6% y 20% de la capacidad respiratoria posterior a un covid sintomático. Por lo tanto, es importante que a los niños cuando empiecen a hacer algún tipo de actividad física y hayan tenido el covid se les evalúe siempre su condición previa y, de acuerdo a eso, planificar una clase de educación física con las precauciones necesarias para no exigirle al 100% lo que los profesores quieren hacer", añadió Arroyo.

"Generalmente las clases especiales debieran armarse en base a las capacidades propias y a la percepción que tienen los niños de su condición de fatiga. Si se sienten cansados van a hablar con el profesor y el profesor tomará esas precauciones, pero lo más importante es que haya una evaluación previa de la condición física del niño y de acuerdo a eso poner una base para poder planificar y hacer las pautas de ejercicio que necesite cada uno de los niños", agregó el profesor y kinesiólogo.

Llamado a la calma

La subjefa de Pediatría de Clínica Alemana, Carmen Gloria Marambio, destacó en tanto que "el tener a nuestra población pediátrica, los menores de 18 años, más del 85% con sus dos dosis de vacuna al menos ya puestas, cambia el panorama frente al cual nos vamos a encontrar al inicio de clases. Por lo tanto, el llamado es a estar tranquilo".

No obstante, afirmó que hay que "empezar este año escolar estando conscientes de que los casos (de contagios diarios) son importantes y estamos frente a una variante muy contagiosa. Por lo tanto tenemos que volver a conversar con los niños sobre la importancia de los cuidados que hay que tener frente al covid".

"Estoy de acuerdo en que los niños que han estado hospitalizados por cuadros de covid más complicados (...) necesitan ver a un médico antes de hacer educación física".

María Luz Endeiza, infectóloga pediátrica