Personas con discapacidad han subido el nivel de depresión en pandemia
Según un estudio estadounidense, el 61% de los consultados mostró signos de trastorno depresivo mayor, mientras un 50% evidenció ansiedad generalizada.
N.E.
EUn estudio de la Universidad Estatal de Oregón (EE.UU.) confirmó lo que muchos sabían: las personas con discapacidades han experimentado altos niveles de depresión y ansiedad durante la pandemia.
El aislamiento social fue el principal predictor tanto de la depresión como de la ansiedad, dijo Kathleen Bogart, coautora del estudio y profesora de psicología en la casa de estudios.
"Sabemos que las personas con discapacidades estaban más aisladas socialmente antes de la pandemia y que, por varias razones, la pandemia elevó esa disparidad", dijo.
Las personas con discapacidad a menudo están inmunocomprometidas o tienen comorbilidades que causarían una infección más grave por covid-19, lo que requiere un aislamiento más estricto para evitar exponerse al virus.
El estudio, publicado en Rehabilitation Psychology, examinó las respuestas de una encuesta a 441 adultos entre octubre y diciembre de 2020 que se identificaron como personas con alguna discapacidad. En total, el 61% de los participantes cumplían los criterios de probable trastorno depresivo mayor y el 50% de probable trastorno de ansiedad generalizada.
Eso es mucho más alto que la línea de base previa a la pandemia entre las personas con y sin discapacidades, dijo Bogart. Estudios previos han encontrado que alrededor del 22% de las personas con discapacidades son diagnosticadas con depresión durante su vida. Según la Asociación Estadounidense de Ansiedad y Depresión, en un año promedio, el 7% de los adultos de ese país tienen un trastorno depresivo mayor y el 3% uno de ansiedad generalizada.
El estigma también fue un predictor de la depresión y la ansiedad, particularmente a partir de conversaciones y políticas sobre el racionamiento médico, donde las personas con discapacidad se consideraban una prioridad baja para los recursos de covid que salvan vidas. Esto se tradujo en un mayor temor de contraer el virus y necesitar atención médica, dijo Bogart.
Pese al alza de los problemas de salud mental, Bogart ve esperanza en sus hallazgos: el aislamiento social y el acceso a la atención médica se pueden abordar con conexiones vía Zoom y telesalud.