Emprendedores afrontan los desafíos de mantenerse en plena pandemia
Tras un mal febrero, los pequeños negocios buscan recuperarse antes de que vuelva la cuarentena a la ciudad.
La Fase 2 vino a ser una oportunidad a los emprendedores para buscar recuperar lo perdido durante el periodo de cuarentena que vivió Arica durante el verano, sin embargo, pese a la etapa de transición, los pequeños negocios aún deben buscar formas para subsistir frente a los desafíos que la crisis sanitaria les ha planteado.
Tal es el caso de emprendedores del sector centro como Gabriela Pizarro, creadora de Q'umara, negocio dedicado a creación de terapias y la venta de diversos productos en base a plantas y esencias naturales que actualmente se encuentra en la feria Santa Blanca. Según comentó Pizarro, su iniciativa ha pasado por una desafiante época: "Lamentablemente el mes de febrero fue cuarentena y aunque la feria si abrió, se parteaba a todo lo que no fuera primera necesidad, me quedé en casa viendo que se podía entregar por delivery, obviamente las ventas bajaron en un 60%. En Fase 2 estamos trabajando y nos hemos mantenido, pero solo eso, no te asegura crecimiento porque hay que recordar que ahora cerramos a las 8, la gente se retira antes por la locomoción. Además hay una agotamiento de materiales porque muchos productos se traían de importaciones, han variado la calidad de los productos, los compromisos de entrega, entonces son las empresas más grandes las que están vendiendo y los chicos estamos dando bote, todo ha subido, por ejemplo una glicerina base que costaba $5.500 ahora vale $7.900 y uno no compra una, lo que es flete ahora es carísimo, una encomienda de 2 kilos salía 8 mil pesos y ahora sale 18 mil pesos ", contó.
Desde afuera
En Mall Plaza, la ONG Simón de Cirene trabaja con una base de 50 emprendedoras, las que actualmente se ponen en el pasillo debido a que la Casona no se encuentra disponible, por lo que según indicó Edith Mamani, coordinadora del proyecto: "en el pasillo trabajan 30 emprendedoras que se van a rotación, trabajan dos por mesa y a la mayoría le afectó bastante la cuarentena. También trabajamos con los emprendedores del Mercado Campesino que son de los pueblos del interior como Camarones o Pampa Tamarugal, a ellos les fue más complicado porque aquí las ventas son buenas para ellos, pero cuando están sin movimiento o sin poder bajar, ellos se quedan con esas cuentas nulas, estuvieron aislados cuando nosotros estábamos en cuarentena y ellos no", explicó.
Por ello, la idea de un regreso a cuarentena es una preocupación real ya que Mamani contó que "el mejor ejemplo fue que las emprendedoras ya tenían material producido para el Día del Amor y eso les provocó muchas bajas porque no pudieron vender todo ese stock".