La U debuta el 10 de marzo con San Lorenzo y Larrivey se tiene fe para anotarles
Los azules debutarán en el Nacional y el miércoles 17 jugarán en Argentina. El artillero lamentó no seguir jugando con Montillo.
N.L.G.
Finalizadas las 34 fechas del Torneo Nacional y a la espera solo del encuentro por la salvación de mañana, la Conmebol liberó ayer las fechas en que se estrenarán Unión Española y Universidad de Chile en la fase 2 de la Copa Libertadores.
Los hispanos debutarán el martes 9 en Santa Laura ante Independiente del Valle y el martes 16 deberán ir a Ecuador para jugar la revancha. En el caso de la Universidad de Chile, su estreno está fijado para el miércoles 10 en el Estadio Nacional frente a San Lorenzo de Almagro, con el partido de vuelta fijado para el miércoles 17 en Buenos Aires.
Ante ese escenario, en la U ya se empiezan a mover en materia de refuerzos. Está confirmado que no seguirán Osvaldo González, Matías Rodríguez, Jean Beausejour y Walter Montillo, mientras que suenan con fuerza el defensa uruguayo Ramón Arias, el volante argentino de Cobresal Marcelo Cañete y el también enganche trasandino Nahuel Luján de Belgrano de Córdoba. Además, el club buscaría un intercambio con La Calera, dando el pase de Esteban Valencia por el del lateral derecho Yonathan Andía.
El tercer mejor
Ajeno al mercado de refuerzos, el delantero Joaquín Larrivey hizo un balance de lo que fue el año de los azules, con un bajón en el segundo semestre tras el despido de Hernán Caputto y la adaptación a la idea del venezolano Rafael Dudamel.
"Terminar terceros después de un año complicado por la ponderada. Esto es terminarlo de la mejor manera. Somos el tercer mejor equipo de Chile y es muy valorable. Lo bueno es que siempre hay un margen de mejora para los resultados y el juego. Ojalá que lo podamos concretar este año y que nos signifique pelear el campeonato", dijo el "Bati" a radio ADN, quien terminó como el segundo goleador del año con 19 conquistas.
El trasandino también habló del adiós de varios referentes, especialmente el de Montillo, que le dolió muy de cerca. "A mí al principio me golpeó porque iba todos los días a entrenar con él, es un amigo, sentía que juntos podíamos seguir aportando al grupo. Pero no se dio y lo fui acompañando en ese transcurso, tratar de estar desde lo mental y humano. y él como dijo se va en paz, se va con el club en la Copa Libertadores".