Ariqueñas son las más perjudicadas en empleo durante la pandemia
Estudio determinó que las mujeres, al igual que en otras ciudades, deben priorizar la casa y los hijos.
Un informe elaborado por el Centro de Economía y Política Regional (CEPR) de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez en alianza con el Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES), detalló que si bien, el impacto económico por el covid-19 ha golpeado a toda la población, en esta crisis ha afectado de manera más potente a las mujeres en Arica y Parinacota.
Los datos del trimestre móvil junio-julio-agosto publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) mostraron que el impacto de la crisis económica afecta a las mujeres en todas las regiones del país, de acuerdo a la última versión del Boletín de Empleo.
De esta manera, mientras la ocupación masculina subió en 1.464 personas, las mujeres ocupadas retrocedieron en 1.035 personas. Asimismo, la tasa de desocupación combinada para la región alcanzó un 28,2% y al desagregar por género, se evidenció la brecha que alcanza más de 11 puntos; 23,6%, para los hombres y 34.7% para las mujeres.
Rol en la crisis
Para Esteban López, director ejecutivo de CEPR e investigador adjunto de COES, las mujeres asumieron roles muy importantes en crisis pasadas, como la crisis financiera del 2008, donde la ocupación masculina disminuyó fuertemente. "La mujer salía a buscar trabajo y los ingresos de los hogares no se veían tan disminuídos", contó.
Sin embargo, la actual crisis sanitaria presenta un escenario distinto, ya que obliga a las personas a quedarse en sus casas y a las mujeres a asumir el cuidado de los niños, siendo las más perjudicadas. "Esta vez golpea económicamente a los hombres, pero mayormente, a las mujeres".
López mencionó que este panorama hace pensar en medidas especiales de reactivación. "El Gobierno lanzó un bono de ayuda para la contratación, con incentivos para las mujeres, pero en ese sentido, no hay una política clara para que las mujeres salgan si el cuidado de la casa aún está desigualmente distribuído", dijo.
Otros datos
El informe de CEPR y COES visibilizó el impacto negativo en el mercado laboral por la pandemia y demandó necesidades locales específicas para una región fronteriza si se considera que la ocupación cayó en Arica y Parinacota, sumando 22.151 personas en los primeros meses del año.
"En mayo-julio se registró un cambio de tendencia positivo, recuperando 3.335 personas ocupadas. Sin embargo, los datos deben ser analizados con cautela, ya que aún hay 22.736 personas ocupadas menos que en el mismo trimestre del 2019. Esta brecha sin duda volverá a incrementarse en los próximos meses cuando se registre el impacto de la segunda cuarentena", mencionó el estudio.
Otro indicador relevante para la región es la brecha entre la tasa de desocupación (9,5%) y la tasa de desocupación combinada (28,3%). La brecha entre estas dos tasas de desempleo antes de la pandemia era estable y de alrededor de 6%, sin embargo, llegó a cuadruplicarse (25%) y actualmente alcanza 18,8 puntos de distancia. "Lo anterior demuestra un desaliento de las personas de la región para salir en búsqueda de trabajo", acotó el informe.
Políticas públicas focalizadas
El director ejecutivo de CEPR mencionó la relevancia del estudio para la implementación de políticas públicas focalizadas que permitan que Arica y Parinacota revierta la crisis económica a causa del covid-19.
"Una de las formas de hacer reactivación de políticas públicas económicas apunta a tratar de incentivar los sectores que generan más empleo, como construcción, que ha sido uno de los pilares que el gobierno ha tratado de impulsar. El problema es que los hombres no son los grandes afectados como vemos en el estudio, por lo que tenemos que hacernos cargo de esas diferencias".
Para López todo el terreno ganado en participación femenina se podría perder a causa de la pandemia, considerando además, que las cuarentenas se extienden por largos periodos.
"Tenemos un escenario complejo que demanda no tener políticas de reactivación iguales para todas las ciudades, menos tomando a Santiago como ejemplo, que tiene un tejido productivo más rico y no tan especializado como las regiones", sentenció.