Trajes, gafas y consultas largas: la nueva forma de ir a un odontólogo
Existen protocolos para resguardar la seguridad del especialista y del paciente, aunque experto dice que aún no es tiempo de abrir la sesiones masivamente.
Natividad Espinoza R.
El inicio del proceso de desconfinamiento ya partió en algunas comunas del país y con eso la opción de salir de sus casas y reanudar, poco a poco, algo de la vida como se conocía antes de la pandemia. Junto a ello, está la opción de retomar los tratamientos odontológicos que fueron aplazados en estos últimos cuatro meses. Sin embargo, para muchos aún existe el miedo. ¿Es seguro asistir al dentista?
"Ingresar a un box odontológico no es el riesgo, el problema es salir de su casa, es tocar el pasamanos de la micro o el Metro. Es caminar por la calle. Por eso creo que estamos en condiciones de poder hacer atenciones de un carácter de urgencia y de priorización, pero no creo que sea el momento para iniciar una atención masiva", dice el dentista del Hospital San José y expresidente del Colegio de Dentistas de Chile, Jaime Acuña.
Y aclara que esto ocurre por época de pandemia, pues asegura que "un dentista, aunque se me enojen las enfermeras y los médicos, es el mejor preparado en bioseguridad. Nosotros hicimos nuestras carreras atendiendo a 40 centímetros de la boca, de la sangre y la saliva de la gente. No hay nadie más preparado para evitar contagios".
Asimismo, agrega: "Ahora se les olvida, pero yo estudié en la década de los 80 donde estaba empezando el VIH y era todo un tema proteger al dentista y al paciente. Por eso te digo, si se cumplen los protocolos, nadie debería infectarse en su visita al dentista".
Por ello dice que si se puede ir en auto, solo y de la consulta a la casa, no habría riesgo de contagio.
Horas más largas
Para eso, hace unos días el ministerio de Salud publicó un documento, que se realizó en conjunto con el Colegio de Dentista, con el paso a paso de cómo debe ser una consulta de este tipo y los cuidados que deben tener tanto pacientes como especialistas. Aquí algunos de esos pasos:
1De ahora en adelante, el dentista tiene que hacer una encuesta telefónica a su paciente para saber si tiene algún síntoma o si ha estado en contacto con alguien que lo sea.
2Las atenciones deben ser más largas, sin personas en salas de espera y separadas y aisladas entre pacientes. Dependiendo de lo que se haga en la consulta, éstas deben ser separadas de 15 minutos a una hora. "Cuando hay procedimiento con una turbina, con la que se hacen las tapaduras, se libera un aerosol que es más riesgoso, entonces dependiendo de eso y de si el box de consulta tiene ventanas es el tiempo que hay que esperar entre uno y otro paciente", dice Acuña.
3 Al llegar el paciente, éste tiene que hacerlo con mascarilla, dejar sus cosas en una bolsa plástica o en un sector exclusivo para eso y lavarse las manos. Al sentarse en el sillón, el dentista realizará su trabajo con mayores medidas de protección, como mascarillas especiales, gafas protectoras y una bata plástica desechable, entre otros. Él a su vez tendrá que usar pecheras desechables y sacarse su mascarilla sólo cuando empiece la atención.
4Al inicio del tratamiento habrá un proceso de desinfectar la boca con povidona yodada o agua oxigenada. Lo mismo se hará al final.
5Cuando se acaba la consulta, la persona retira sus cosas y en el box se hace un aseo terminal, donde se bota todo lo desechable, se hace un aseo del sillón dental completo, se cambian los instrumentos. La ropa plástica se bota a la basura.