Las playas de Arica se caracterizan por su calidez y oleaje más suave que los balnearios del centro y sur del país, es por ello que bañarse de noche, luego de una once familiar en la arena, se ha convertido en una de las tradiciones ariqueñas que más adeptos suma por estos días.

Los balnearios más visitados en la noche son El Laucho y La Lisera. Desde la Municipalidad de Arica comentaron que "aunque no se cuenta con cifras exactas sobre la cantidad de bañistas en horario nocturno, las cifras de ingreso a los baños, posterior a las 20 horas es de 40 personas por hora aproximado en promedio en cada uno de los dos balnearios".

La frescura de la brisa marina nocturna, la ausencia del sol y la calidez del agua son aprovechados por los turistas y familias ariqueñas que asisten en masa a la playa para darse un chapuzón y compartir con sus seres queridos.

Esta tradición ha sido traspasada de generación en generación, ya que antiguamente, en la década de los 70 y 80, las playas eran visitadas, al igual que ahora, por turistas y ariqueños.

Edgar Muñoz, encargado de Turismo de la Municipalidad de Arica, comentó que "En Arica contamos con playas habilitadas que poseen aguas tibias en horario nocturno, lo cual sin duda es atractivo para locatarios y turistas. Con el objetivo de potenciar las playas de noche, desde la Municipalidad este año ampliamos el horario de los baños de La Lisera hasta las 21:30 horas, a su vez, se realizó el Plan Maestro de Iluminación, instalando luminarias LED en las playas Chinchorro, El Laucho y La Lisera, con una inversión de 57 millones de pesos y un financiamiento 100% municipal".

"Otro factor importante es promover el buen comportamiento de los bañistas nocturnos, en especial con el tema de la basura. Como Municipalidad hemos duplicado esfuerzos para mantener limpio y haciendo campañas de conciencia, pero la comunidad debe asumir su compromiso".

También informaron que desde la Municipalidad de Arica se han realizado mejoras en los siguientes servicios: Los baños de La Lisera pasaron a ser administrados por la Dirección de Turismo, logrando ampliar el horario hasta las 21:30 horas.

"Se llevó a cabo el Plan Maestro de Iluminación, con financiamiento municipal y que renovó la iluminación de las tres playas habilitadas: Chinchorro, La Lisera y El Laucho. Este plan implicó instalación de luminaria LED, reparación de postes, implementación de cableado subterráneo, entre otros. Con esto se puso fin a varios años donde las playas permanecieron oscuras".

Con respecto al horario de salvavidas, este es de 11 a 20 horas en cada una de las playas habilitadas.

Descanso familiar

En la playa El Laucho se encontraba la noche del martes, Julio Rojas junto a su familia disfrutando de El Laucho.

"Nos gusta venir a disfrutar de esta playa en la noche, el agua es tibia, se puede bañar hasta tarde, Arica es una ciudad tranquila. Siempre nos quedamos hasta la una de la mañana, pero esta semana como es el festival nos vamos un poco antes. Viene mucha gente, se da un clima muy agradable, familiar, es bueno para los niños porque el sol no está entonces no se corre el riesgo de quemarse".

Los visitantes llevan mesas, sillas, termos, sandwichs y comparten en grupos de amigos o familiares una once observando el mar y bañándose.

Gabriel Alarcón, turista de Santiago, comentó que "siempre me habían hablado de la playa La Lisera que no tiene olas y que se puede venir de noche, por eso es que aprovechamos de traer a los niños, que han disfrutado mucho y la han pasado súper bien. Es un lugar muy seguro, las playas cerca de Santiago son muy heladas a diferencia de acá. Tienen un clima privilegiado y deben aprovecharlo turísticamente".

Además de los grupos familiares también hay bastantes emprendimientos que han aprovechado la afluencia de visitas para vender alimentos.

Lo más frecuente es encontrar carritos de completos, empanadas y jugos naturales, pero también hay otras opciones como los crepes que vende Julien Laur (32), francés radicado en Arica hace 2 años.

El joven europeo contó que llegó porque su esposa es ariqueña y se conocieron en Europa. Primero estuvo trabajando en el carnaval y hace 15 días que trabaja en El Laucho.

"Vendo crepes salados y dulces, con manjar, frutas y nutella. También pueden ser con helado y los salados con jamón, queso y huevo. Trabajo hasta aproximadamente las 11 de la noche, dependiendo del día; a la gente le gustan mis crepes. Es un producto relativamente nuevo, me ha ido bien y me gusta mucho Arica".

Otro de los emprendimientos es la venta de paletas de helado, Cristina Rivera, de 33 años, lleva un cooler y vende paletas desde los 100 pesos.

"El verano y los turistas son una oportunidad de trabajo para quienes nos hace falta una ayuda económica. Arica es una ciudad que me gusta mucho, hace bastante calor en la noche, pero eso nos favorece como comerciantes para vender cosas que refresquen y hagan bajar un poco la temperatura corporal". Arica, además, tiene el privilegio de tener 2 playas habilitadas durante todo el año: La Lisera y El Laucho.