Llamado a la paz y a detener violencia logra apoyo transversal y casi unánime
Presidente invitó a los chilenos a rechazar la violencia. Partidos políticos y actores sociales se sumaron al llamado.
Redacción - Medios regionales
El llamado del Presidente Sebastián Piñera a unirse en "un acuerdo por la paz y contra la violencia" logró el apoyo de actores de todos los sectores políticos y de otros representantes de la sociedad.
El martes en la noche, el mandatario convocó a dicho acuerdo cuando ya estaba por finalizar una de las más duras jornadas de las últimas semanas y que incluyó incendios intencionales en una iglesia de Santiago y en la Gobernación del Biobío, saqueos en varias otras iglesias de regiones, supermercados destruidos, quemados y dos víctimas fatales y otros hechos.
LAGOS: "crisis GRAVÍSIMA"
El propio mandatario ocupó Twitter ayer para reforzar su llamado: "Chilenas y chilenos de buena voluntad: unamos nuestras voluntades y corazones para lograr un AcuerdoPorLaPaz y contra la violencia. Un acuerdo por un Chile más justo y un acuerdo por una nueva Constitución. Hoy nuestro país nos pide y exige unidad, grandeza, generosidad y patriotismo".
La invitación de Piñera fue recogida la misma noche del martes por líderes opositores, lo que destacó ayer la ministra vocera de Gobierno, Karla Rubilar, quien habló de "las valientes voces" que "se están alzando para lograr un acuerdo por la paz".
También el ex Presidente Ricardo Lagos emitió ayer una declaración:"La crisis es gravísima.Su prolongación durante 27 días nos dice que el tiempo se agota. Tenemos que dar respuestas concretas.La violación a los derechos humanos es inaceptable, como lo es también la violencia que hemos visto en estos días en las calles de Chile. Es necesario salir pronto de la situación actual y recuperar la convivencia serena y pacífica que permita responder a las justas demandas sociales".
Citas en la moneda
Ayer, durante toda la jornada, el Presidente recibió en La Moneda a líderes de organizaciones de la sociedad civil, de las pymes y del mundo político, desde Mariana Aylwin hasta sus ministros de Estado y subsecretarios (fueron convocados a las 17.30 horas en Palacio), para abordar el acuerdo por la paz, comprometer la participación de sus sectores y recoger propuestas.
La defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, expuso que el Presidente "cuenta con la Defensoría de la Niñez para lograr este acuerdo por la paz porque todos los niños, niñas y adolescentes de nuestro país, sin exclusión alguna, lo necesitan con urgencia". Ella fue una de las representantes de instituciones estatales y de la sociedad civil que estuvieron con el mandatario. Muñoz resaltó que haya quedado de manifiesto, en las palabras que escuchó del Presidente, su "valoración de los derechos humanos" y que las violaciones a estos son "intolerables". Además, pidió a todos los actores "que dejen sus trincheras y se comprometan en el trabajo territorial", incluso con los niños, para contribuir a que la situación en el país cambie.
El director ejecutivo de la Fundación para la Confianza, José Murillo, llamó, "desde el respeto irrestricto a los derechos humanos", a "salir de la trinchera y construir un nuevo piso para alcanzar la paz".
"UNa tregua"
Antes, el titular de la Cámara de Diputados, Iván Flores (DC), dijo que "la ciudadanía ha hablado fuerte y tenemos que responderle con prontitud y eficacia. En momento tan crítico para la convivencia, estabilidad social y económica, se requiere un respiro, una tregua".
El diputado Jaime Bellolio (UDI) expuso que "todos los llamados a la paz son importantes" y que "es hora de que dejemos nuestros prejuicios y trincheras ideológicas de lado y nos pongamos a disposición del país. Yo estoy disponible". Su par comunista Camila Vallejo, escribió: "No sé si detrás de los incendios y saqueos hay ultraderechistas, ultraizquierdistas o solo rabia desatada, pero la condenamos sin matices. Para avanzar por una paz social, le pedimos al Gobierno dejar de infringir dolor a la población".
Ayer, en tanto, la Fiscalía Regional de Arica confirmó la muerte de un hombre, cuyo cuerpo calcinado se hallaba entre los escombros del supermercado Lider de Arica incendiado el martes tras un saqueo. La violenta jornada también dejó un fallecido en Calama y 19 ataques a cuarteles de Carabineros a lo largo del país. Hubo 398 eventos violentos graves; 406 heridos, incluidos 340 policías; 840 detenidos y 95 locales saqueados.