Carlos Rodríguez Ilabaca

Hace pocos días Claudia Andrea Norero Meza subió un mensaje a Facebook donde ofrecía orientación y ayuda para las personas que quieren bajar de peso. Ahí, aludía a su propia historia para decir que sí se puede combatir la obesidad y el sobrepeso sin necesidad de recurrir a pastillas o intervenciones quirúrgicas. Y como el mejor ejemplo, publicó dos fotos suyas: una de hace ocho años, cuando pesaba 140 kilos; y otra actual, con 65 kilos menos.

La joven, de 30 años, recibió varios comentarios de apoyo y otras tantas consultas, pero también hubo una mujer que, a través de la misma red social, la acusó de mentir y hacer publicidad engañosa. En palabras sencillas, le quiso decir que el radical cambio que mostraba en las fotografías era imposible de lograr.

A la televisión

Claudia Norero confiesa que desde pequeña tuvo problemas con el peso. Hija única por el lado de su madre y regalona de sus abuelos maternos, fue criada bajo el mito que dice que "el niño gordito es un niño sano".

A los 15 años, cuando cursaba primero medio, ya pesaba 90 kilos. Al salir del colegio, decidió estudiar Cocina Internacional en el Inacap. "En el instituto teníamos que probar todo lo que cocinábamos. Y lo que sobraba en los talleres no se podía regalar. Se botaba o se comía. Yo, obviamente, me comía todas las sobras".

Al egresar del Inacap, en 2009, su cuerpo alcanzaba los 140 kilos. "Mi papá (Eduardo Norero) y los dos hermanos que tengo por parte de él son muy deportistas; en cambio yo, siempre llevé una vida sedentaria y me alimentaba de mala manera, porque en la casa de mis abuelos, donde me crié, siempre había mucha comida".

Al año siguiente, en 2010, dejó la ciudad de Viña del Mar y se vino a vivir a San Antonio junto a su madre, Claudia Meza. Un día ambas estaban tomando once cuando en la televisión salió un aviso para un programa que buscaba personas obesas con aptitudes para el baile. Se trataba de "La dieta del lagarto", de TVN, un concurso que evaluaba a los participantes tanto en el baile como en la cantidad de kilos que lograban perder.

"A mí siempre me había gustado bailar. Postulé y quedé seleccionada", recuerda esta joven de 1,70 metro de estatura.

En alrededor de cuatro meses de participación en el programa -apareció en tres capítulos durante 2011- perdió los primeros 10 kilos gracias al ejercicio que hacía bailando y a la asesoría de una nutricionista del mismo espacio televisivo. "Pienso que si bien no gané el concurso, si no hubiese pasado por ahí jamás habría logrado lo que conseguí con el tiempo".

Tras "La dieta del lagarto", Claudia Norero enterró su estilo sedentario y comenzó a cuidarse "estrictamente", mezclando el ejercicio con una alimentación sana. En un año, sin pastillas ni operaciones, se liberó de otros 40 kilos.

En 2012 dio un paso que terminaría cambiando el rumbo de su existencia y también su cuerpo. Ese año ingresó, con 90 kilos, a la academia de zumba de Hugo Mambo, uno de los instructores más reconocidos de San Antonio. "Me encantó la zumba y Hugo (Mambo) me dijo todo lo que tenía que hacer para certificarme como profesora de zumba, lo que logré en 2013 en un centro de Santiago. A esas alturas ya había perdido otros 10 kilos y estaba en 80".

Inmediatamente, empezó a dictar clases en la sede del club Carlos Condell del cerro Arena y luego en el gimnasio Power Fitness de calle Lautaro. Ahí conoció a Francisco Orellana, poseedor de títulos nacionales y regionales de culturismo, quien se convirtió en su pololo. "Con él comencé a entrenar con pesas, porque llega un punto en que el trabajo cardiovascular (ejercicios físicos) no es suficiente. Se hace necesario entrenar con sobrecarga para quemar grasa y activar la musculatura".

Proyecto personal

En enero de 2015, junto a su pareja, se hizo cargo del gimnasio Activa tu Vida (calle La Boya 849, Villa Italia), donde imparte clases de zumba y de fitness, una disciplina que combina distintos ejercicios físicos con intensidad.

"Mucha gente, como la mujer que me escribió al Facebook, no me cree que bajé de los 140 kilos a los 75 que peso actualmente. Sí, es cierto que tengo piel suelta, pero para verme más delgada tendría que operarme o hacer más ejercicio", reconoce.

-¿Y por qué no se ha querido operar?

-Porque me quiero tal cual soy. Esto es un proceso de aceptación. Si bien es cierto que todo entra por la vista, hay cosas más importantes. Soy una persona y si me veo distinta a la mujer que era antes es consecuencia de todo lo que he hecho.

Con lo anterior Claudia Norero se refiere a los ocho años que lleva dedicada a cultivar su cuerpo solo -insiste- con ejercicio y alimentación sana. "El problema es que mucha gente quiere resultados en dos o tres meses, y eso es imposible, sobre todo para quienes tienen problemas de exceso de peso", afirma.

-¿Qué debe hacer una persona que quiere bajar de peso y no llevar una vida sedentaria?

-Lo ideal, para cualquier persona, es hacer ejercicio al menos tres veces a la semana, por al menos 30 minutos, y sumarle una buena alimentación.

-¿Qué se entiende por una buena alimentación?

-Depende de la persona. Nosotros somos deportistas y nos preparamos para competir. Pero alguien común y corriente, debe consumir al menos cinco comidas diarias -cada tres horas-, con la ingesta calórica de acuerdo a la actividad física que tenga. Y eliminar los productos con azúcar, como pasteles, galletas y bebidas.

-Antes de entrar al programa de TV, ¿intentó bajar de peso con dietas o pastillas?

-Pasé por miles de dietas. Pero me pasaba que bajaba 15 kilos, y luego subía 30. Y las pastillas, las probé una sola vez y no me gustaron. No eran para mí.

-¿Qué siente ahora cuando se ve al espejo y se compara con la imagen que tenía cuando pesaba 140 kilos?

-Me siento orgullosa, precisamente porque nunca quise tomar pastillas ni operarme.

-¿Se puso más vanidosa con el radical cambio que tuvo su cuerpo?

-No, a mí no me pasó. Siempre he tenido el autoestima alta, porque era regalona de toda mi familia. Pero sí creo que me faltó ayuda sicológica por el tema de la seguridad.

Actualmente Claudia No-