Vidal y Barcelona fueron eliminados
Jugando un partidazo el Liverpool dio vuelta la eliminatoria y goleó 4-0 en la Champions. Hoy se conocerá su rival en la finalísima.
Deportes - La Estrella
Lo realizado por Liverpool en las semifinales de Champions League se puede catalogar de varias formas. Épico, sorprendente, epopeya, casi imposible. Pero mostrando el mismo fútbol que exhibió en la ida, esta vez el elenco inglés sí estuvo acertado y terminó protagonizando una de las remontadas más memorables que se recuerden en las últimas Champions. El elenco de Anfield se impuso 4-0 a Barcelona y dejó sin validez el triunfo 3-0 de los catalanes en la ida. Sencillamente espectacular lo realizado por el conjunto dirigido por el alemán Jürgen Klopp.
En el equipo visitante, el volante Arturo Vidal fue titular y hasta el primer tiempo, jugaba un partidazo quitando muchos balones y cortándole los circuitos a los ingleses. Pero el nacional no podía solo. Le faltó más compañía de un equipo que no lo fue.
El Barcelona sencillamente se confió de las individualidades de Messi y Suárez, quienes fueron una sombra con respecto al Camp Nou. De principio a fin, Liverpool fue más. A los 7' Origi marcó el primero y encendió la ilusión de los hinchas locales. Si bien no pudieron sacar más diferencias en dicho lapso, los británicos se desataron en el complemento. Clave fue el volante holandés Georginios Wijnaldum, quien ingresó iniciado el segundo período y los 53' y 55' igualó la llave en favor de los rojos.
Increíble
Lo increíble es que entró por la lesión del escocés Robertson. El dueño de casa siguió machacando y merecía el cuarto tanto, ante un Barcelona que sólo esperaba el pitazo para ir a la prórroga. Pero a los 78' y en una jugada digna de fútbol amateur, Liverpool apuró un corner y Origi puso el cuarto ante los desconcentrados jugadores catalanes.
La epopeya ya estaba escrita. El resto tuvo a un conjunto catalán buscando el descuento sin ideas (y sin Vidal que fue sustituido a los 74') ante un Liverpool que escribió una de las páginas más doradas de su historia. En la vereda contraria, Barcelona vive un dejavu del año pasado (cuando fue eliminado por la Roma) y uno de los episodios más bochornosos del último tiempo.