Se motivaron a enseñar con un solo alumno
Bastián Oteiza, Francisca Ramirez y Diego Redunante unieron fuerzas para formar el club "Sin Límites" solo con lo que tenían, ahora poseen 10 estudiantes.
Hace seis meses tres amigos amantes de recorrer las olas decidieron formar su propio club, un club en el que no solo pudieran reunirse para practicar el bodyboard, sino que la meta iba a la enseñanza de la disciplina sin importar los recursos de sus alumnos.
El Club Deportivo Social y Cultural "Sin Límites A.A" inició en abril con un solo alumno y la motivación de Bastian Oteiza, Francisca Ramírez y Diego Redunante, financiándose con rifas y ocupando sus propios implementos para enseñar los primeros pasos para convertirse en rider en una ciudad como Arica, aprovechando espacios que van desde la ola más famosa de la ciudad, El Gringo de la Ex isla El Alacrán, pasando por las olas sobre arena de playa Las Machas, hasta probar el sector conocido por los riders como "El Rancio", ubicado cerca de la zona industrial de las pesqueras, al sur del borde costero.
Según relató Oteiza, Máximo Biglio de 8 años fue su primer alumno, "empezamos con él y luego se fueron sumando más niños, ahora tenemos desde los 8 hasta los 17 años y en verdad se hace un ambiente bien grato,
De los tres profesores, solo Bastian ha competido de forma profesional en una competencia de bodyboard, siendo invitado especial al mundial de bodyboard realizado en Arica en 2017, "me regalaron el cupo por ser rider local, en realidad es el único cupo que han regalado, me consideraron que podía ser un buen participante en El Gringo", comentó Bastian, sin embargo, las ganas de compartir la experiencia de dominar las olas ariqueñas bastó para desarrollar el club.
Más con ganas
Aunque ya llevan seis meses de vida y poseen la personalidad jurídica, el club no cuenta con un lugar físico de reunión y la gestión para sus clases ha corrido por iniciativa de los tres fundadores, "podía conseguirme un vehículo de mi familia para ir a buscar a los alumnos e ir a dejarlos, pero ahora sobrepasamos el limite de diez niños y se ha vuelto complicado, tratamos de apoyarlos a todos, incentivándolos pese a que no tengan a veces como costear sus materiales o pagar sus clases, por eso se acercan a nosotros y así llegamos a un acuerdo para entregarles trajes o tablas, así se han sumado muchos niños", comentó Redunante.
Clases funcionales
Además del bodyboard, la preparación física también la toman en cuenta para la preparación deportiva de sus alumnos, por lo que decidieron realizar además clases de entrenamientos funcionales, lo que Redunante explicó que son "son circuitos por estaciones con intervalos de 40 segundos por 10 segundos de descanso, son ejercicios que llevan al limite de lo que uno puede dar, estos ejercicios son abierto a la comunidad, pero también invitamos a los niños del bodyboard a participar, solo que los sábados y domingos les hacemos un ejercicio especifico para entrar al agua y luego para salir".
Actualmente tanto Diego como Bastian son encargados de las clases de bodyboard, mientras que Diego y Francisca dictan las clases de entrenamiento funcional en la cancha 49 a un costado de los edificios Pukarani cada lunes, miércoles y viernes, esperando seguir creciendo como club, mezclando su pasión con las olas y su trabajo.