El conductor que intentó atropellar a dos carabineros de servicio en pleno centro de la ciudad, lloró en el Tribunal cuando escuchó que la jueza Paulina Zúñiga decretó la medida cautelar de prisión preventiva por considerarlo un peligro para la seguridad de la sociedad. Expuso que el imputado puso en riesgo la vida de los policías y de transeúntes.

Formalización

El fiscal Gonzalo Figueroa con todas las pruebas que presentó ante el Tribunal logró que el imputado de 20 años (el tribunal prohibió publicar su identidad) quedara privado de libertad en la Cárcel de Acha.

El conductor fue formalizado por el delito de homicidio frustrado a carabineros de servicio; arriesga una pena que parte de los 10 años y un día a 15 años de cárcel.

El persecutor expuso que el imputado estaba manejando un jeep sin licencia de conducir y al ser fiscalizado por dos carabineros que se encontraban con un perro policial, le cursaron una citación al Juzgado de Policial Local. Como el imputado se molestó por el parte, lanzó el vehículo encima de los funcionarios en dos ocasiones lo que llevó que el sargento segundo José Pereira, procediera a utilizar su arma de servicio, disparando en cuatro oportunidades al vehículo. El conductor se dio a la fuga y dejó abandonado el móvil siendo detenido en el sector de la Playa Chinchorro.

Diligencias

El fiscal expuso que solicitó varias diligencias a unidades especializadas de Carabineros y también una reconstitución de escena a la Brigada de Homicidios de la PDI. En un examen preliminar, determinó que el sargento utilizó su arma de servicio en legítima defensa porque vio en riesgo su vida y la de su compañera.

El persecutor expuso que el funcionario efectuó los disparos a tres metros del vehículo lo que significa que no quiso herir al conductor, porque el policía recordó que el imputado se trasladaba con una mujer y una menor de edad.

El vehículo resultó con impactos balísticos en el parachoque, neumáticos y en la zona baja del parabrisas.

El fiscal expuso la declaración de cinco testigos, uno de ellos el conductor de una camioneta que subió a los funcionarios y salieron en persecución del conductor.

La jueza Paulina Zúñiga, calificó como irresponsable la actitud del imputado de manejar un vehículo y colocar en riesgo la vida de personas.

La defensora penal pública, Camila Matus, si bien no realizó cuestionamiento a la legalidad de la detención, denunció en la audiencia que su representado presenta una herida en el glúteo izquierdo que habría sido causada por el can policial y no recibió atención médica . En tanto el fiscal Gonzalo Figueroa expuso al tribunal que el día que ocurrieron los hechos le preguntó al imputado cómo lo habían tratado y sobre su estado de salud, "primero me respondió que lo trataron bien y en segundo lugar que estaba bien de salud y no me señaló de alguna herida", planteó el fiscal al Tribunal. Asimismo comentó que existe una connotación de lesiones donde aparece una herida. La jueza decretó que fuera enviado al Hospital.

Por otra parte, la defensora expuso al tribunal que su representado no posee antecedentes penales y el día del incidente se trasladó al centro en compañía de su pareja y su hija a realizar un trámite. Luego le cursaron un parte y peleó con su pareja, ella se bajó del auto junto a su hija.

Comentó que su cliente, estaba enojado y no tuvo la intención de causar daño a los funcionarios . Además calificó el procedimiento como abusivo y desproporcionado.