Cuando los vieron bajar las enormes quebradas que preludian el ingreso al valle, el medio centenar de estudiantes de la pequeña escuelita multigrado del Valle de Codpa no lo podían creer. Tampoco los pocos educadores y ni el mismísimo alcalde de Camarones. Disfrazados de diferentes superhéroes de fantasía y portando diversos regalos, una media docena de hombres montados en motos de altas cilindradas, se dejaban caer para llevar quizá una de las jornadas más alegres de sus vidas, en una localidad distante 114 kilómetros al suroriente de Arica. Se trataba de los miembros del grupo Ruta 5 Norte.

Como recuerda Ángel Rojas, uno de los motoqueros que pintó de sonrisas la cara de los niños codpeños, el grupo empezó hace tres años con la ayuda y eventos sociales. "Empezamos haciendo actividades en favor del comedor de la Tía Petita. Una amistad supo que teníamos un club de motos. Nos propusieron participar y fue algo muy bonito, que nos llenó a todos el corazón y así partió esto", rememora Rojas.

Desde entonces no han parado y realizan actividades además en jardines infantiles, y diferentes lugares para ocasiones como la Navidad con el Viejito Pascuero, cuando se los solicitan.

Los interesados llegan a ellos por datos de boca a boca, como el fue el caso de la escuela de Codpa.

"Para nosotros la experiencia de ir a Codpa fue algo que ni los niños se imaginaban ni nosotros tampoco, de que ellos iban a reaccionar de la manera que lo hicieron. O sea el ver a los niños que nosotros bajábamos los cerros y les tocábamos la bocina, y observar cómo corrían, cómo se subían a las motos, eso nos dejó el corazón lleno", añade Marcos Ahumada.

Sensación que comparte Ángel Rojas: "Para nosotros esta invitación fue algo totalmente nuevo. Nunca habíamos salido tan lejos a hacer una actividad así. A los niños le dimos una vuelta en moto, les sacamos una fotito, les repartimos golosinas, y quedaron todos contentos. La alegría que sientes en el corazón por verdad la felicidad en el rostro de los niños es algo impagable", añade Rojas.

Motoqueros solidarios

Ruta 5 norte está formado por una docena de particulares de diferentes profesiones y oficios. A nadie se le priva de participar, y aunque es importante tener una moto, no es un requisito excluyente. "En realidad no hay un requisito de ingreso, solo el filtro natural de que la persona congenie con el grupo", señala Marcos.

Aunque la mayoría posee una moto y tampoco se exige un modelo específico, también hay miembros que no la tienen, pero que aportan con ideas y soporte material para las diferentes actividades.

En este evento hecho en Codpa, participaron prácticamente todos. "Fue un día de semana, por lo que la logística fue algo complicada, pero igual nos decidimos, nos hicimos un tiempo y fuimos", señalan a coro los motoqueros.

Pamela Soto, asistente de la educación e inspectora de la escuela de Codpa fue quién les pidió que vinieran. "Quiero dar las gracias a los amigos de Ruta 5 Norte por haber venido a darle alegría a estos 50 niños, de diferentes nacionalidades, que estudian aquí. Es un recuerdo que quedará marcado en sus vidas, que no lo olvidarán", sentencia agradecida la inspectora de la escuela de Codpa.