Una buena alternativa para pasar un verano entretenido y aprendiendo son las escuelas de surf en el sector donde se juntan playa Chinchorro y Las Machas.

Y una de ellas con vasta experiencia y que cuenta con 9 monitores es la Escuela de Surf y Bodyboard "Akua".

Jóvenes y niños llegan en buena cantidad cada mañana al sector y antes de empezar con su deporte favorito, tienen un precalentamiento con zumba o practicando vóleibol y otros juegos.

Luego de ello, escogen sus tablas preferidas, las que cuentan con atractivos diseños.

Francisca Ramírez, coordinadora de la escuela, cuenta que "tenemos niños de 5 años para arriba, pero sin límite de edad, porque igual llegan adultos como los papás, pero el fuerte de la asistencia son los niños".

Las clases son de lunes a sábado, de 10 a 1 de la tarde y antes de entrar al agua realizan yoga y juegos recreativos como partidos goleados.

Luego de esta actividad, los niños pasan al agua para aprender o practicar el surf por espacio de una hora y media.

En cuanto a los requisitos, no es indispensable que sepan nadar y siempre están con los instructores y además el equipo que se colocan les da sustentabilidad.

"Acá hay varios niños que son becados y los que pagan financian proyectos sociales, y la idea es que todos tengan la posibilidad de participar y aprender el surf y bodyboard", explica Francisca Ramírez.

De hecho, la escuela les proporciona los trajes y tablas que deben escoger y usar para la práctica del surf y del bodyboard en estas vacaciones. La escuela no sólo es formativa, sino que también apunta a la competición.

Para quienes van a la playa Chinchorro en el sector donde se junta con Las Machas y no han llevado nada para aplacar el hambre y la sed, una solución y alternativa es el local "La Terraza".

En el bien implementado sitio se ofrecen tortas, helados, café y todo tipo de bebidas.

Se abre de lunes a viernes desde la 1 de la tarde hasta las 23 horas, y los sábados, domingos y feriados de las 11 de la mañana hasta las 23 horas.

Una de las características de La Terraza es que se trata de un ambiente familiar, enfocándose en la gente que va por las tardes a la playa.

Hay una variedad de comidas y bebidas y los veraneantes pueden hacer un alto tomando un helado o café y disfrutando de la puesta de sol, aseguran dos de las encargadas del acogedor local.