Apesar de las acciones implementadas en los sitios turísticos para incluir a las personas con discapacidad , afectados expresan que el espacio en La Lisera aún no está apto en su totalidad para llenar las expectativas.

Yenni Bastidas dice sacar el mayor provecho posible de los sistemas implementados por los entes competentes que permitan la sana recreación de los minusválidos ya que su hijo de 24 años presenta dicha condición, pero que las actuales condiciones del espacio limita a que sea un área de inclusión.

"Desde el verano pasado he venido realizando denuncias sobre los tablones rotos en la caminería de madera que dificultan que yo y demás personas que tengan condiciones similares, puedan trasladar correctamente a los discapacitados sin necesidad de pedir ayuda a otros para poder levantar el sistema hasta la otra parte".

Dijo además que no solo lleva un año pidiendo el arreglo de la caminería en La Lisera sino que también las duchas no cuentan con rampla de acceso para las sillas de rueda por lo que deben cargarlas junto a los discapacitados físicos para que puedan disfrutar de un baño luego de la playa.

"Hasta la intendenta dijo que darían solución pero imagínate ya va un año y no pueden arreglar las tablitas del piso que no es nada del otro mundo, hasta con trozos de madera que tengan por allí pueden repararlas", dijo.

Bastidas aprovechó el espacio para felicitar a los líderes regionales por el apoyo a la creación de espacios inclusivos, aunque no dejo a un lado la responsabilidad que dice, tiene la municipalidad en el mantenimiento de los lugares turísticos.

Desde el MOP

El secretario regional ministerial de Obras Públicas, Jorge Cáceres, señaló que ha existido un trabajo permanente con la Municipalidad en su condición de concesionario de la playa La Lisera, disponiendo incluso recursos y el equipo de la Dirección Regional de Obras Portuarias (DOP) del MOP para hacer mejoras en este balneario y en El Laucho.

Paralelamente -indicó- tras una propuesta del MOP, el municipio decidió financiar la contratación de un arquitecto, para que elaborara, junto al equipo de profesionales

de la DOP, un proyecto integral de mejoramiento de las dos playas, donde uno de los aspectos a abordar será la inclusividad.

La autoridad explicó que esta propuesta debiera estar lista al finalizar el 2018, para licitar las obras el 2019 y realizarlas en temporada baja de turistas. "Tenemos el compromiso de mejorar permanentemente las obras y el municipio debe contribuir con el mantenimiento. Esperamos que cada ciudadano contribuya también a cuidarlas, porque son necesarias para todos".