La Corporación de Desarrollo de Arica y Parinacota (Cordap) comenzó a desarrollar acciones en conjunto con Zofri Arica y Aduanas, para difundir los beneficios de la zona franca industrial, con el propósito de aumentar el número de sus usuario.

Actualmente, de un universo de 14.000 empresas que operan en esta zona, solamente 69 trabajan y se favorecen con el régimen franco.

Como parte de esa planificación conjunta, se inició un ciclo de capacitaciones, atendiendo el interés de empresarios por conocer el régimen de zona franca industrial que existe en la región.

Para ello se realizó una reunión con los empresarios- socios de la Cámara Chilena de la Construcción, en su sede ubicada en el edificio Alborada.

En el encuentro participó personal de Aduana de Arica, servicio que se constituye en una pieza clave por ser quien califica el proceso industrial. También concurrieron representantes de Zofri Arica y Cordap, quienes de acuerdo a su intervención en el sistema respondieron las consultas de los asistentes.

Más que contento, agradecido y esperando que se incremente la llegada de turistas a Tímar, en la comuna de Camarones, se mostró el presidente de la junta vecinal de la localidad, don Filiberto Mamani Ramos quien participó de la ceremonia de inauguración de la Casa del Club Adulto Mayor "Aukitaka" y la restauración del Programa de Puesta en Valor del Patrimonio que fue financiado por el Gobierno Regional y la Subsecretaría de Desarrollo Administrativo (Subdere).

La actividad festiva que se realizó en el sector precordillerano contó con la presencia de los vecinos de la zona; la intendenta, Gladys Acuña; el alcalde de la comuna, Iván Romero; el Jefe de la Unidad Regional de la Subdere, Ernesto Lee, además de los representantes de la Fundación Altiplano que ejecutó el programa.

La intendenta, Gladys Acuña, destacó la voluntad política del Gobierno de la Presidenta, Michelle Bachelet que a través del Programa de la Puesta en Valor del Patrimonio complementado con el FNDR se han entregado recursos para recuperar las fachadas del pueblo.

Como un día hábil cualquiera. Así lució el centro durante ayer, ya que no fueron pocos los que dejaron las compras navideñas para última hora.

El panorama fue similar en las tiendas y en las ferias, donde las aglomeraciones se juntaban eligiendo el regalo pendiente o bien, aprovechando las ofertas de último minuto.

"Cada año optamos por comprar el mismo día o uno antes de la Navidad, ya que notamos que las tiendas rematan y bajan aún más los precios de los productos", comentó Claudia Acevedo, quien con su familia paseaba por el retail.

Y es que muchos son "inmunes" al estrés que puede provocar el ir contra el tiempo, ya que además de los regalos, la mayoría de las familias están abocadas a la preparación de la cena o de la visita a los seres queridos.

"No queda otra, hay que hacerse el ánimo no más porque durante la semana fue imposible dedicarse a vitrinear. Entre el trabajo, los niños y otros quehaceres, no quedó más que dejar las compras para el final", comentó Carmen Valenzuela, otra compradora de última hora.

Empaquetadores felices

Quienes sacaron cuentas alegres fueron los empaquetadores que en los últimos días se instalaron en diversos puntos del centro y que este fin de semana vieron incrementado su trabajo.

"Es tercer año que nos instalamos con mi hermana acá en 21 y sabemos el día de Noche Buena es clave, porque la gente anda desesperada buscando regalos y también envolviéndolos", relató Susana (20) quien trabaja junto a su hermana Fátima, de 16 años.

Afuera de una tienda de retail, un entusiasta joven ofrece papeles, cintas y tarjetas "Señorita ¿se lo envolvemos?" le pregunta a quien pase por el lugar. "Es que el carisma hace la diferencia, hay que saber ganarse a los clientes. Ha sido una semana larga, pero no podemos quejarnos, nos fue bien, sólo queda celebrar", dijo.