El auto ya lo tenían y el motor lo trabajaron durante cuatro meses para hacerlo funcionar. Dos jóvenes argentinos salieron desde Salta a una aventura de crecimiento personal recorriendo América.

Ingresaron por Chile por el paso de Jama, porque quisieron empezar su viaje por la costa, ya que de donde provienen, en el paisaje son prominentes las montañas.

"Lo primero que esperamos es recorrer América, llegar a Centroamérica y pasar por Panamá; no descartamos si sale algún viaje marítimo con el auto a otro continente", comentó Tomás Durruty (26 años), quien se desempeñaba como celador en un colegio de secundaria en Argentina.

Eliseo Álvarez (25 años), su compañero, se encontraba trabajando en permacultura, bioconstrucción y agricultura orgánica; con Tomás se conocían hace ocho años y cuando finalizó un proyecto, se coordinaron para arreglar el auto y viajar.

La joyita

Vendieron parte de sus cosas para iniciar el viaje, el cual comenzó la primera semana de abril y no tiene fecha de retorno.

"La gente chilena nos ha tratado muy bien, bautizaron al auto como 'la joyita', no le teníamos nombre, eso es lo lindo que da el auto, contacto con la gente, como es algo visual hace rejuvenecer a los más adultos".

La joyita fue comprada por Tomás hace tres años por gusto, sin pensar que lo usaría para un viaje. Una vez que decidió iniciar esta aventura, en un momento pensó venderlo para comprar dos motos, pero al final se acentuó la idea de viajar en el auto.

"Es un auto fiel, nos ha tratado bien y lo tratamos bien".

Viaje

Para los jóvenes el viaje ha sido adrenalínico porque mientras se van alejando de su casa, han visto cómo empiezan a fluir las cosas.

"Cuando estuvimos en Iquique, hubo semanas en que no nos subimos al auto y cuando nos movimos del lugar para hacer otra ruta y desafíos por conocer, es muy interesante la sensación. Se conoce mucha gente; en Iquique conocimos una familia rumana", comentó Eliseo.

Por su parte Tomás comentó que lo que le interesa de esta travesía es "desprenderse de lo material; estamos buscando vender incluso algunas cosas que tenemos y no le damos uso para alivianar la carga y para desprender. Esperamos que sea un viaje de mucho aprendizaje, el conocimiento por cosas y lugares nuevos, pero también de la gente".

Los chicos están vendiendo algunas artesanías, pero también están dispuestos a tomar oportunidades de trabajo a cambio de comida, alojamiento o bencina, o nafta como le dicen ellos.

Ruta Seiscientos

Su Facebook es Ruta Seiscientos, en el cual van subiendo sus aventuras, las personas que conocen y también se contactan con gente.

"Hablamos con una persona que nos ofreció alojamiento cuando vayamos a Colombia", comentaron los jóvenes.

Su paso por Arica fue durante el mes de abril y lo último que subieron en su Facebook es que se encuentran en la capital de Perú, Lima.