Cuando Oliver llegó, la vida de Constanza Alarcón (24) cambió para siempre. El pequeño maltés llegó en un momento difícil y desde entonces, se volvieron inseparables.

El amor que siente por su mascota sirvió para que creara un emprendimiento pensado en quienes, como ella, consideran que los animales son un miembro más de la familia. Así nació 'Doggy Sitter', un servicio de cuidado de mascotas totalmente personalizado.

Lo que ofrece Constanza no es una guardería cualquiera, como las que ya existen en Arica. Con ella, los dueños de los animales pueden encontrar una verdadera 'niñera' para sus perritos.

"Pueden dormir en su cama o encima de la mía. Nadie lo bajará de los sillones y a todos los clientes les doy mi celular para que puedan ver por video llamada a sus mascotas cuantas veces quieran en el día", cuenta la emprendedora.

Constanza además destaca que sus cuidados incluyen el llenado de una ficha por parte de los amos, en los que se registran las mañas y regaloneos preferidos, así como datos de emergencia; veterinario de confianza; si es que están tomando algún medicamento; cuánto están acostumbrados a pasear y un apartado de "otros" para que anoten cualquier cosa que les parezca relevante.

El comienzo

Como la mayoría de los emprendimientos, 'Doggy Sitter' nació por necesidad.

Un día cualquiera, Constanza debía viajar con su marido a Iquique. "Nos costó demasiado encontrar un alojamiento petfriendly, así es que nos pusimos a buscar hoteles para mascotas en Arica para dejar a Oliver mientras viajábamos. Encontramos algunos, sin embargo, no era lo que buscábamos", recuerda.

La joven comenta que en estos lugares, si bien permiten que los 'cachupines' anden sueltos la mayor parte del día, junto con darles de comer y darles juguetes, no permiten a los peludos huéspedes dormir dentro de las habitaciones, ni rascarles la panza o despertarlos en las pesadillas.

"Estas alternativas tampoco dan la opción de que uno pueda llamar en diferentes horarios para saber de la mascota. Finalmente, esto fue lo que me hizo pensar 'qué ganas de poder pagarle a alguien que cuide a mi perrito -hijo dentro de su hogar y lo regalonee como yo', y así nació el negocio".

Y es que para Constanza, Oliver es un verdadero hijo de cuatro patitas, por lo que ella dice entender perfectamente las aprehensiones de algunos dueños con sus mascotas.

CUIDADORA y paseadora

El servicio básico de 'Doggy Sitter' consiste en 12 horas de cuidado, el que es acordado con el cliente. El único requisito que se solicita eso sí, es presentar el registro de desparasitaciones y vacunas al día. El dueño debe dejar además el alimento de la mascota. "El servicio incluye un máximo de tres paseos de 15 a 20 minutos cada uno.

El segundo servicio requerido incluye la estadía nocturna, teniendo una duración total de 26 horas

"También hemos considerado planes especiales por estadías superiores y un descuento en casos de viajes sobre los 10 días".

La forma de contactar los servicios de 'Doggy Sitter' es a través de Facebook.

Constanza cuenta que lo más complejo desde que comenzó con el negocio, a principios de año, ha sido convencer a los clientes de la importancia de mantener a los animales con desparasitaciones y vacunas al día.

"Esto es elemental para mí, porque también tengo a mi perrito. Además, interactúo con los demás de la misma forma que con Oliver, los acaricio y dejo que se suban a las camas, por lo que se trata de un tema básico de salud", explica.

Por otro lado, cuenta que dentro de los principales requerimientos que hacen sus clientes, está el que le envíe fotos de las mascotas durante su estancia, algunas video llamadas y dejarlos dormir a los pies de la cama. "Son cosas que yo también requeriría para mi Oliver... Lo importante es consentirlos, entretenerlos y apapacharlos", finaliza.