De vuelta a los entrenamientos se vio ayer en la cancha principal del estadio Carlos Dittborn al plantel de San Marcos, luego de cosechar un empate en la agonía ante Santiago Morning en calidad de visitante.

La práctica fue dirigida por el ayudante técnico, Oscar Pereyra, hermano del entrenador Ariel Pereyra que regresa hoy tras solucionar algunos temas en la capital, donde el semestre pasado entrenó a Magallanes.

Tras el entrenamiento, el ayudante del "fantasmita" dialogó con este medio, entregando su opinión del debut de los Bravos de Arica y su nuevo cuerpo técnico en el campeonato de Clausura de la Primera B.

Oscar Pereyra, manifestó que "el debut fue difícil porque Santiago Morning tiene un equipo que presiona en mitad de la cancha y cuando recuperan el balón, juegan en forma directa, que era lo que esperábamos".

En este aspecto, destacó "la entrega y sacrificio del plantel durante todo el partido y en los últimos 15 minutos nos costó recuperar la pelota, pero lo bueno es que siempre tratamos de hacer buen fútbol, y prácticamente todo el partido estuvimos parados desde mitad de la cancha hacia adelante".

Pereyra resalta que en los entrenamientos "lo que se inculca es buscar el arco rival y eso trabajamos en el día a día para luego hacerlo en los partidos".

- ¿Los deja conformes el desempeño de los que entraron a reemplazar a los ausentes?

- Por supuesto ya que al ver las estadísticas de los partidos, en el 100 por ciento ha jugado casi el mismo equipo y los que entraron ahora, habían jugado 15 minutos o media hora, y por eso se hizo difícil para ellos, pero nosotros tuvimos la confianza para que jugaran y nos respondieron de la mejor forma.

- ¿Esto hace más competitivo el plantel para el torneo?

- Creo que sí, porque a medida que esto avance serán más competitivos los puestos y acá todos van a tener su oportunidad y eso es lo bueno porque si los 11 que están jugando tienen otros 10 afuera pisándole los talones, vamos a tener un mejor plantel".

De regreso

En cuanto a lo que se viene para el próximo domingo ante Iberia de Los Ángeles, uno de los que volvería es el mediocampista Octavio Pozo, que por suspensión se perdió el duelo ante Morning. Pozo expresó ayer que "la verdad es que vi bien a los compañeros que entraron, llevábamos sólo una semana entrenando y vamos a mejorar llevando a la práctica lo que quiere el técnico, y felicito a todos porque Santiago Morning no es un rival fácil". Sobre Iberia para el duelo del domingo, opinó que "todos los equipos son complicados, no hay ninguno fácil y vimos como Valdivia le empató a Curicó, y nosotros no tenemos que mirar a nadie sobre el hombro".

En su análisis, Pozo piensa que "tenemos que estar aplicados y seguir haciéndonos fuerte de local marcando la diferencia".

Por último, llamó a la hinchada para apoyar al club y a los jugadores en casa ante Iberia.