Pamela Serey A.

En cualquier época del año, las uñas son una parte importante del look. Es importante que combinen con la ropa que se lleva puesta, pero, también, con el tono de piel. Además, se debe tener en cuenta cuáles son los tonos que se están usando. Están los tonos básicos y clásicos, que combinan con todo, y más.

Lo primero que se debe tener presente es aplicar una base en la uña. Eso es como un brillo transparente que protege la uña y evita que se manche con el color que se vaya a aplicar.

Paulina Peña, maquilladora de MAC, quien se encargó de maquillar a Paris Hilton cuando estuvo en Chile, afirma que hay un paso previo que se debe tener en cuenta: "Hay que limar bien la uña. Que los bordes y la uña queden lo más lisos posible. De esa forma, el esmalte se va a adherir de mejor forma y tendrá más duración".

Luego, dice, hay que aplicar el producto transparente, "en una sola capa. No es necesario más, porque sólo se logrará que la uña quede muy gruesa y no es necesario".

Una vez terminado ese paso, se debe aplicar el color. "La técnica es poner el tono en el centro primero y luego pasar el pincel por los costados", indica Peña.

Los tonos de moda

La elección del color será fundamental en el look. "Las uñas proyectan lo que uno quiere expresar del outfit", recalca la experta.

Es por eso que esa decisión debe ser meditada. Hay tonos que son clásicos, como el rojo, el negro, el burdeo y la "francesa". Este último es aplicar un tono rosado claro y un blanco en las puntas de las uñas. En algunos casos, también se pone sólo un brillo, pero el blanco es el color que le da el estilo.

Según destaca Peña, los tonos que están de moda son los metalizados, los cromados y los diseños libres "más que los dibujos", dice.

Por ejemplo, "se puede esmaltar la uña negra y hacer unas líneas doradas. Se verá distinto y elegante".

Una vez escogido y aplicado el color, se debe cubrir con una capa selladora. "Eso permitirá tener una mayor duración" de la pintura en las uñas.

Cómo retirar el esmalte

Hay una fórmula para no dañar la uña. Se debe humedecer un algodón con quitaesmaltes, luego ponerlo sobre la uña y envolver el dedo con papel metálico. "Eso ayudará a que no se dañe la uña. En el caso de los esmaltados permanentes, hay que ir sí so sí donde un especialista, porque sino se arrancarán las capas de la uña", cierra.

"La técnica es poner el tono en el centro primero y luego pasar el pincel por los costados".

Paulina Peña"