Animadores de matrimonios andinos cuentan los entretelones de la tradición
Entre dos mil y tres mil personas asisten a estas fiestas cargadas de costumbres como "los cariños".
Hace nueve meses Sherry y Jairo Tavalí son animadores de matrimonios andinos, fiestas donde asisten entre dos mil a tres mil personas. Ahí, chilenos, peruanos y bolivianos comparten tradiciones de origen boliviano.
Los jóvenes son locutores de Radio Andina y este año comenzaron a participar en estas celebraciones cuando los llamaron para animar el casamiento de Iván Mamani y Evelyn Flores. donde estuvo el grupo de cumbia andina boliviana, Los Ronish.
"Fue un matrimonio gigante en el Club de Huasos a dos escenarios, con grupos internacionales", comenta Jairo, a quien apodaron Tunta, que significa "chuño blanco", en aymara.
Tres días de fiesta
La costumbre de estos matrimonios son celebraciones prolongadas, ya que por lo general el viernes se hace una rogativa a la Pachamama, hay dos días de fiesta (sábado y domingo) y un día de celebración más íntima entre familiares (lunes).
"El primer día se hace una rogativa a la madre Pachamama para que les vaya bien en la fiesta: no haya peleas, que los novios disfruten, por los padrinos, que este todo bien técnicamente y el sábado comienza la fiesta, con el recibimiento que hacemos nosotros", le agrega Sherry.
Jairo cuenta que no son días de corrido, si no que paran a eso de las 4 de la mañana y al otro día a la hora de almuerzo se come Kalapurca para reponer energías.
Los cariños
El recibimiento es después de la ceremonia en la iglesia, en el local arrendado, donde los animadores los esperan con una diana o fanfarrea andina y presentan a todos los padrinos de los novios.
"Después pasamos a la entrega de cariños, que son cajas de cerveza con una piña decorada que es el Ferrocaril, donde hay distintos tragos en cortos. Los novios le dan la piña con licor a los padrinos a modo retribución", comentan ambos, quienes rescatan la fraternidad entre familias al compartir.
La tradición es que en vez de llevar un regalo, se les prende dinero a los novios. "Hay una aguja con hilo que se les cose en la chaqueta o vestido, y el hilo va recibiendo los cariños de los invitados".
Del vals al huayno
Los animadores narran que luego de que los novios bailan el vals, todos sus padrinos y padres se pasan al huayno.
"Hacen una ronda entre todos y se empiezan adesordenar un poco".
Jairo agregó que son eventos muy producidos donde incluso hay guardias de seguridad.
Sherry es aymara y es parte del staff de animadores del Carnaval con la Fuerza del Sol hace seis años.
Para ella es bonito participar en estas tradiciones. "Hay parejas muy jóvenes que se están casando y rescatan esas tradiciones de las cuales antes se avergonzaban".
El último gran matrimonio que animaron fue el de Pablo y Maritza, donde asistió la orquesta que la está rompiendo en Perú, Papillón, "la del rico vacilón", quienes llegaron a l ciudad con dos integrantes de Agua Bella y cantaron por dos horas.