El Paseo 21 de Mayo es el punto de encuentro de varios artistas, músicos y artesanos. Pero también es el lugar escogido por los vendedores ambulantes que ofrecen a los ariqueños jugos naturales, cubos y ensaladas de frutas. En fin, la gama de cosas que se puede comprar es amplia. Desde un simple cubo de 300 pesos hasta un queque de cannabis o sushi a mil pesos.

Entre tanto comercio, cerca de la calle Colón se ubica en la semana el carrito de Mario Sánchez de la comunidad Hare Krishna, quien comenzó el año 2004 su odisea vendiendo panes integrales y galletas sin permiso en el Paseo 21 de Mayo. Producto de eso muchas veces se fue detenido, tanto así que ya era usuario habitual de las celdas.

"Después de tanto intentarlo, logré conseguir un permiso el año 2014 y me compré un carrito donde vendo pan integral, barras de cereal, queques, galletones y los sandwich. Pero pronto traeremos el pan de pascua", contó Sánchez.

Otra emprendedora que también frecuenta el Paseo 21 de Mayo, sobre todo en las mañanas es Teresa Sola, una vendedora de ensalada de frutas.

"Cada día me traigo entre 40 y 45 frascos con fruta y los vendo todos hasta las 12 y media y de ahí me voy a casa a comprar las cosas para hacer el almuerzo y la fruta para vender mañana. Eso es lo que hago toda la semana, días donde mis clientes me prefieren porque todo lo que vendo lo preparo yo y muy fresquito", contó Teresa.

Al igual que ella hay otros 5 carritos que venden ensalada de frutas, donde mujeres y abuelitos de la tercera edad llevan con esto el sustento a sus hogares.

En el paseo, hasta un carro de supermercado con naranjas a mil se venden algunos días. Pero la que sí está toda la semana es Iberia, una joven madre que refresca a los peatones con sus cubos y jugos naturales de varios sabores, los cuales vende en menos de 3 horas.

Entre tantos productos comestibles, el Paseo 21 de Mayo también tiene espacio para el arte, donde Marco Moya es el presidente de Aricarte, agrupación que reúne a los artistas que frecuentan el paseo. "Desde el año 95 que estoy en el Paseo 21 de Mayo y ha costado mucho tener un permiso, los que antes costaban 8 mil pesos, ahora están entre 45 y 60 mil pesos más o menos, por que quieren erradicar a las personas que venden en lugares públicos", contó desde su experiencia.

Desde Lynch hasta Prat existe una serie de productos, donde usted puede decidir qué comprar, según lo que busque.