Desde el primer día que se vieron se enamoraron. Se conocieron en una fiesta y nunca más se separaron. Es la historia de amor que unió a Nikol Castillo Espinoza y José Manuel Quiñinao Gutiérrez. Es el matrimonio que conmocionó a todo Arica tras ser atropellados por sujetos que estaban huyendo de un tiroteo cuando se encontraban al interior del estacionamiento ubicado detrás de la Piscina Olímpica. Ambos fallecieron en el lugar.
Ayer los restos de Nikol y José fueron velados al costado de la Capilla del Carmen. Sus familiares y amigos estaban desconsolados al ver cómo dos jóvenes tranquilos perdieron la vida de esta trágica manera. Ellos dejaron a dos niños, uno de 3 y 5 años sin la alegría de crecer al lado de sus padres.
Quiénes eran ellos
José es el cuarto de sus cinco hermanos, trabajaba en la construcción y Nikol como manipuladora de alimentos en la escuela España del Valle de Azapa.
"Mi hermano era el más alegre de la familia, nunca se podía hablar nada en serio con él, todo era risa, nos agarraba para la palanca en momentos buenos y malos; bueno para las fiestas y los asados (...) amigo de su amigos", contó Jocelyn, hermana de José.
Algo que caracterizaba a esta pareja -comentó- era el amor que se tenían, "Ellos se amaban mucho. Mi hermano siempre me decía que todo era para su mujer y sus hijos, nunca se imaginó la vida sin ellos y mi cuñada tampoco, pasaron momentos difíciles como todo matrimonio, pero ellos nunca se hubiesen separado, él siempre nos decía que Nikol era el amor de su vida".
Justicia
Si bien reconocieron estar dolidos como familia, Jocelyn aseguró que no espera nada de la justicia.
"Estamos tan decepcionados de todo, de las autoridades y del sistema en general. Me mataron a mi hermano y a mi cuñada, No espero nada de la justicia, entran a la cárcel y salen a los pocos días y ahora tienen pensado dejar libre a 146 presos, eso significa que tenemos que encerrarnos en nuestras casas para evitar que nos pase algo", planteó la hermana de José.
El mismo día que ocurrió la tragedia, los familiares de ambos jóvenes organizaron una velatón en el lugar donde ocurrieron los hechos; llegó una gran cantidad de personas.
"Les dije a todas las personas que llegaron a la velatón que esto que le ocurrió a mi hermano y a mi cuñada les sirva de enseñanza para que los jóvenes de esta ciudad, tomen conciencia que a veces es mejor organizar un carrete en la casa que salir a una disco, ya que no existe la seguridad; trabajo en el sector centro y he visto cómo han asaltado a personas". Sus funerales están programados para hoy en el cementerio Parque Arica.