Los representantes de los cerca de 600 vecinos que viven de manera irregular en la Población Cerro Chuño, están en constantes reuniones con las autoridades regionales para buscar una solución de contar con luz y agua sin estar colgados. Señalaron que están dispuestos a pagar a las empresas para contar con dicho suministro.

En estos momentos están conformando una mesa de trabajo que estará conformada por varios organismo públicos, por ejemplo el Serviu los asesorará en la conformación de un comité de viviendas para luego comenzar a trabajar con los vecinos para ingresarlos como grupo organizado y asistirlo desde la unidad de gestión territorial. Además están actualizando el catastro para evaluar si todos están en condiciones de recibir subsidios.

Al consultar si existe una fecha de cuándo van a demoler las primeras viviendas, el director del Serviu, Juan Arcaya señaló que aún no existe una fecha exacta, pero tienen como estimación el inicio del segundo semestre.