Hace más de 40 años que don Óscar Bravo (60) se viene dedicado al rubro de la venta y reparación de relojes en el local que maneja en la Feria Santa Blanca.

Sin embargo, además de ajustar las manecillas del tiempo en su tienda, a este relojero lo mueve la pasión por el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, evento al cual ha asistido durante dos décadas.

Aburrido de asistir como espectador a la Quinta Vergara, hace cinco años Bravo consiguió un espacio en la radioemisora local Frecuencia Tropical y con micrófono en mano envía sabrosos reportes desde la Ciudad Jardín.

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Luciendo su credencial VIP, esa que le permite codearse con los famosos de la tevé, y momentos antes de votar por una de las candidatas a reina del certamen viñamarino, don Óscar se refirió a lo bueno, lo malo y lo feo del festival.

"Una de las cosas que siempre destaco vez que tengo la oportunidad de asistir al evento es la belleza de las mujeres, sobre todo, de las postulantes al cetro festivalero", manifestó Bravo.

En este sentido, el comunicador no tuvo tapujos para gritar a los cuatro vientos su predilección por una de las candidatas.

"La Luli, sin duda, es mi preferida, ya que es una muchacha simpática, esforzada y muy humilde, siempre con una sonrisa dispuesta a conversar contigo, y espero que gane", dijo.

Enfático fue en señalar que "el humor en la Quinta se lleva lo feo y lo malo del show. Siento que las rutinas, que por estos días han venido ofreciendo los comediantes nacionales, se basan mucho en lo burdo y ofensivo (...) Hacen falta presentaciones como las que nos regalaban artistas de la talla de Coco Legrand, Checho Hirane o Bombo Fica; más chistes blancos y no con tanto garabato".

Respecto del cartel de estrellas que el festival posee, "Lionel Richie, Eros Ramazzotti y Luis Jara son los cantantes que más admiro de la parrilla programática".