Más de 6.100 millones de pesos invirtió el Estado en el nuevo edificio que inauguró ayer la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi). Se trata de una estructura que incluye elementos de diseño, ingeniería y tecnología que permiten no sólo que la estructura resista un sismo sin colapsar, sino que además siga en conexión durante e inmediatamente después de una emergencia.
Según explicó el organismo, la construcción incluye 16 aisladores sísmicos de alto amortiguamiento (HDRI), capaces de reducir entre seis y ocho veces el impacto de un movimiento telúrico.
La escalera y el ascensor están separados, lo que permite un movimiento vertical y horizontal de hasta 40 centímetros, lo que hace que el área de las oficinas administrativas y el Centro de Alerta Temprana se muevan independientes, los que cuentan con tecnologías que garantizan mantener la comunicación con todas las regiones.
La Presidenta Michelle Bachelet, quien estuvo presente durante la inauguración de ayer, aseguró que "me alegra saber que este será el edificio que va a alojar al futuro Servicio Nacional de Gestión del Riesgo y Emergencias, una vez que la ley sea aprobada, y que esperamos sea pronto. Y confío que esta nueva casa será testigo y protagonista de la nueva mirada que estamos implementando en materia de emergencias, una mirada capaz de anticipación y gestión oportuna".
Presencia en regiones
La obra, instalada frente al Parque O'Higgins en Santiago, tiene 5.600 m2 y fue ejecutada por la dirección de arquitectura del Ministerio de Obras Públicas.
El director de la Onemi, Ricardo Toro, destacó que el edificio, además de ser la imagen corporativa del organismo, "se complementa con avances en la gestión institucional traducida en una mayor presencia en regiones; en el establecimiento de protocolos con organismos técnicos; en la creación de una política nacional en gestión de riesgo de desastres y en la discusión de un proyecto de ley para nuestro fortalecimiento institucional".
El edificio original, que estaba ubicado en el mismo terreno santiaguino, había quedado gravemente dañado para el terremoto del 27 de febrero de 2010, donde la gestión fue duramente criticada. J