La palabra "Vondú" podría ser un nombre de mujer, una localidad de Colombia o hasta parte de la cultura haitiana, pero es difícil imaginar que tiene relación con lo que ocurrió el 26 de enero, arriba del yate de ese mismo nombre y donde se vio afectada una joven empleada de unos 20 años.
En esa fecha, y de acuerdo al relato de la Fiscalía, el dueño de la embarcación ordenó a su empleada extranjera acompañarla hasta el Club de Deportes Náuticos, donde mantenía su yate anclado, instruyéndole que realizara una limpieza de la embarcación.
Tras esto, el propio empleador comenzó con serias insinuaciones, las que terminaron directamente en una violación hacia la mujer, quien por la lejanía de tierra firme, tuvo que esperar hasta que amaneciera para poder retirarse a su casa, relatando lo sucedido a un familiar, quien hizo llegar la denuncia a manos de la Brigada de Delitos Sexuales y Menores de la PDI, que logró detener al empresario, dueño del yate y autor de la agresión sexual.
LOGRO DE LA FISCALÍA
A mediados de esta semana, y tras una serie de antecedentes presentados por la Fiscalía local, el Tribunal Oral logró condenar a Pablo Duvingello Alfaro, quien fue acusado de violar a su asesora del hogar de nacionalidad peruana a bordo de un yate de su propiedad, hecho registrado en enero del presente año.
El juicio oral por estos hechos se extendió por cinco días y culminó con el veredicto condenatorio unánime de los jueces del tribunal, en el marco de una investigación desarrollada por el fiscal Rodrigo Benitt, quien presentó una serie de pruebas que lograron acreditar el delito de violación.
LA OBLIGÓ
La indagatoria del fiscal Benitt estableció que tras realizar esa labor de limpieza, la mujer fue obligada a ingresar a la fuerza al dormitorio de la nave, donde el acusado procedió a violentarla sexualmente.
Según antecedentes recopilados, la joven había llegado a Arica para reunir la mayor cantidad de fondos posibles, para luego ingresar a un convento y hacerse religiosa, lo que fue impedido por el ataque y el trauma con el que quedó la mujer.
En el juicio oral también intervino el Centro de Apoyo a Víctimas (CAVD) de la Subsecretaría de Prevención del Delito, con el fin de querellarse contra el responsable.
Pablo Duvingello Alfaro presenta una condena por estafa y arriesga 12 años de prisión a solicitud del Ministerio Público. J
