Antiguamente era casi una obligación estar casado a los 25 años. Las mujeres a esa edad ya iban por el segundo o tercer hijo y los hombres adquirían tempranamente responsabilidades de padre y trabajador.

Hoy esa realidad ha cambiado y cada vez son más las mujeres que postergan la maternidad con el fin de establecerse económicamente, viajar, tener una casa propia y, en resumen, alargar lo que más se pueda la juventud.

Para los hombres es lo mismo. Muchos de ellos viven solos con grupos de amigos o bien se hacen cargo de sus hijos cumpliendo el papel todavía no muy frecuente de padres solteros. Además, están las parejas gay que conforman una nueva tendencia en el núcleo familiar.

Este es el caso de Mónica Ruiz y Berta Martínez, una pareja de mujeres que convive hace 10 años. Se conocieron por una amiga en común. Mónica estaba cesante y Berta comenzó a enseñarle el arte de tejer redes para la pesca. Ahí comenzó el romance. Berta había estado casada durante 11 años con un hombre, pero no quería repetir esa experiencia. Su flechazo fue tal, que a la semana de conocerse ya estaban viviendo juntas.

Desde esa época la pareja ha pasado por altos y bajos. Problemas de salud y económicos las han llevado a 'tocar fondo', como ellas dicen mirándose a los ojos.

Llevar adelante un hogar no ha sido fácil. Berta y Mónica arriendan una pieza y ahorran para tener su casa propia. Mónica es auxiliar de aseo, realiza un curso de guardia en Prodemu y Berta es jardinera paisajista. El fin de semana se dedican al comercio ambulante.

Su sueño es casarse en la Iglesia San Marcos o en la de Las Peñas, pero debido a la legislación actual este proyecto aún está a la espera de poder cumplirse.

'Chile no puede cegarse a una realidad que está presente en todo el país. Cada vez son más las parejas homosexuales que conviven y que desean sellar su unión para siempre. Es un convenio que nos merecemos, ya que, en caso de muerte, ninguna puede dejarle nada a la otra si no se hace a través de un notario', explica Mónica, quien se define como la de 'más carácter' de la relación.

Aunque no es su caso, creen que la adopción, en especial para los hombres, es un tema relevante. Ambas son madres de relaciones anteriores y sus hijos aceptaron su decisión sexual con el tiempo.

Se turnan por semana para cocinar y Mónica es la primera en levantarse.

'Despierto a las 6 de la mañana y le llevo el desayuno a la cama. Luego me voy a trabajar', cuenta.

En la tarde es Berta quien tiene la misión de preparar la once. Disfrutan de ver televisión juntas, largas conversaciones y de los postres que les fascinan.

A diferencia de Mónica, que desde pequeña supo que le gustaban las mujeres, Berta se definió como lesbiana a los 30 años y de su experiencia dice que, en una relación con una mujer, se siente mucho más cómoda. Destaca las sutilezas y el lenguaje no verbal.

'Los hombres son más bruscos, fríos y con poca sensibilidad. Con Mónica apenas nos miramos sabemos lo que nos pasa. Hay otra conexión', asegura Berta.

Se definen además de pareja como amigas, confidentes, amantes y cómplices.

No tienen problemas en mostrar su amor al mundo, al contrario, se sienten orgullosas de ello, creen que en Arica se ha avanzado en la tolerancia, pero que todavía falta.

'No andamos dándonos besos en la calle. La gente que nos conoce nos acepta como somos. Lo único que nos causa un poco de risa son algunos hombres que nos dicen 'ustedes son así porque no conocen a uno de verdad'. Hasta propuestas indecentes nos han hecho', cuentan.

Berta y Mónica conforman parte de las nuevas familias ariqueñas que buscan ser reconocidas como tales. Quieren tener los mismos derechos que las parejas hetero y esperan que la legislación las apoye en convertir su sueño realidad: el matrimonio.

Cristopher y Felipe Bustamante son una familia monoparental constituida por padre e hijo.

Él es Prevencionista de Riesgos tiene 26 años y se hace cargo de su hijo de 7.

Cumple el rol de padre y madre a la vez. Cocina, hace el aseo, lleva a su hijo a la escuela, se preocupa de sus tareas y realiza todas las labores que normalmente hacen las mujeres. Además trabaja.

'Los que viven esta situación saben que no es fácil. Dejo cocinado en la noche para el otro día, porque sino no alcanzaría. Lo que más le gusta al Pipe son los fideos', cuenta Cristopher, quien hoy celebra el Día del Padre.

El caso de él se remonta a un acuerdo que tuvo con la madre, quien le pidió ayuda, porque el niño estaba pasando por un mal momento escolar.

Cristopher revela que, desde que nació su primer hijo (ya que también tiene otro de un año), que ha luchado por la tuición de Felipe, pero que 'siempre los tribunales favorecen a las madres'. 'No me gustaba el ambiente en el que se estaba criando. Por eso él empezó a tener problemas en el colegio. Desde el año pasado que vivimos juntos y ha sido una hermosa experiencia'.

En la calle le dicen 'Papi Ricky', como el personaje de la teleserie que llevó a la fama a los padres solteros, y en las reuniones de apoderados es el único hombre.

Agrega que es una responsabilidad que le gusta y no entiende por qué las mujeres se complican tanto con la crianza.

'Cuando acepté este desafío me puse los pantalones y creo que lo he hecho mejor que cualquier mujer'.

Cristopher comparte, además, las típicas actividades masculinas como el jugar fútbol y todo lo que conlleva la complicidad masculina.

Los días que tiene libre salen a pasear, van al Morro, a la playa y a los juegos infantiles. Lo aconseja en las primeras confidencias sentimentales y es el favorito de sus amigos.

'Todos conocen al Pipe, cuando vienen mis amigos él es el regalón. Creo que si hubiese tenido una niña la situación no sería la misma y habría sido más difícil', reconoce.

Según el último informe de política social, la familia constituye la unidad básica de toda sociedad. Es el lugar donde por esencia las personas reciben amor, sustento y seguridad. Al mismo tiempo, la familia es donde los niños tienen el primer contacto con el mundo, la que la convierte, en su principal fuente de formación, educación, de valores y principio.

Por lo anterior, la familia es una institución con gran incidencia sobre las decisiones que toman los jóvenes. Esta importancia que tiene la familia en el desarrollo personal de los chilenos quedó plasmada en la Séptima Encuesta Nacional de la Juventud 2012, que dio cuenta que para los jóvenes este núcleo es considerado uno de los ejes centrales para alcanzar la felicidad.

Samuel Pozo, director regional del Injuv, explica que la transformación familiar es uno de los primeros pasos en los que deben avanzar las sociedades modernas.

'En primer lugar está el tema de la independencia. Hoy los jóvenes retrasan cada vez más el irse de la casa por comodidad y falta de estabilidad económica. Eso retarda la edad de casarse. Todo esto conlleva una transformación social de la cual Chile está siendo testigo', destaca.

Según las cifras de la Encuesta de la Juventud, la edad promedio de los chilenos para abandonar el hogar de los padres es a los 29 años. El matrimonio se retrasa hasta los 34 (Registro Civil) y las mujeres están siendo madres aproximadamente a los 28 años. Tendencias que están transformando el tradicional concepto de la familia chilena. J