Así fue el último día de los seremis: se llevaron libros y todos sus recuerdos
Cajas y cajas salían de las oficinas de los secretarios ministeriales, con objetos personales acumulados en su estadía de cuatro años y que no quisieron lanzar al tarro de la basura. Por ejemplo el seremi de Economía, Pablo Arancibia, sacó cinco cajas donde guardó libros, fotografías y su taza de café. Incluso, en los muros de su oficina se pueden ver los clavos donde tenía colgados sus cuadros más preciados.
"Tenía mi título, fotografías de mi familia y otra que aparecía junto a Pablo Longueira", contó Arancibia. Aseguró que se va tranquilo por la labor que realizó y que extrañará esos encuentros con la comunidad. "Voy a echar de menos muchas cosas, hasta los piropos de las mujeres" dijo entre risas.
La revelación de este gabinete fue sin duda, el seremi de Justicia Clemente Cerda, quien ocupó hasta el cargo de gobernador subrogante. Se considera un hombre muy ordenado y dijo que no se llevará muchas cosas.
"Voy a guardar con mucho aprecio el libro que editó Gendarmería, relativo al indulto conmutativo, donde tenemos el grato placer de estar en varias páginas como región y mi gestión como seremi, además me llevo el recuerdo que nos entregó el alcalde Salvador Urrutia", comentó Clemente. También manifestó que se va feliz y que extrañará el servicio público y a su equipo de trabajo. Además adelantó que volverá al sector privado. "Antes de asumir como seremi trabajé en la Corporación de Asistencia Judicial. Ahora vuelvo a ser abogado, retorno a los tribunales; espero que sea sólo por un tiempo, me gusta el sector público", expresó Clemente.
La seremi de Vivienda, Karla Villagra, muy emocionada hasta las lágrimas, dijo que se lleva todo el cariño de los dirigentes sociales y de todas las familias que lograron mejorar su calidad de vida.
"Guardé y me llevo a mi casa todos los regalos de los dirigentes vecinales y un poncho y una chupalla que me regalaron en septiembre y en especial el libro que lanzamos como ministerio: la 'Historia de Barrio'", sostuvo.
Comentó que va extrañar el contacto con la gente y que se va muy satisfecha y contenta por el trabajo que realizó. Agregó que le hubiese encantado implementar el Plan Guañacagua de suelo salino. "Le estamos dejando todo listo al próximo seremi", acotó. Además reconoció que lo más complicado que le tocó vivir fue sacar adelante el Plan Polimetales. "Fue difícil poder ganar la confianza de las familias, no confiaban en las palabras de las autoridades nuevas y en un periodo de 4 años logramos concretar el 70% de avance de la construcción de viviendas", dijo entre lágrimas Karla Villagra.
El vocero de Gobierno Marcelo Urrutia desocupó el viernes su oficina. Comentó que como buen cristiano sacó su Biblia, el crucifico y su agenda de apuntes.
"Me voy con mucha satisfacción de haber cumplido; soy uno de los seremis que más duró dentro de la administración", planteó. Agregó que presentó su renuncia el lunes 3 de marzo ante el propio Presidente de la República. Además contó que volverá al mundo académico. "Lo primero que voy hacer es llegar a mi casa y darle un abrazo a mi esposa que fue un gran aporte en mi trabajo por las largas horas fuera del hogar, y pienso dedicarme a la función académica, voy retomar mi trabajo en una universidad regional", anunció Urrutia. J