Desde el sábado tienen entre 25 y 30 cortes diarios. Los principales clientes: escolares y profesores.
Las melenas, las patillas, las mechas de colores y los mohicanos tuvieron que desaparecer o camuflarse de las cabezas de los niños y jóvenes durante esta semana debido a la vuelta a clases, donde por reglamento, algunos colegios exigen el pelo corto y ordenado.
El edificio Richard, ubicado en pleno centro de la ciudad, entre Baquedano y Maipú, estaba repleto de gente, principalmente de madres con sus hijos pequeños y jóvenes que se afrontaban para la vuelta a clases.
David, quien trabaja en la peluquería Junoy, dijo que toda la semana les ha ido bien con los cortes. "Al día, por lo menos yo he hecho 30 cortes, cuando en un día sin mucho movimiento hago 12. Estamos tomando puros cortes de niño que vuelven al colegio. Lo que más piden son los cortes de futbolistas como Arturo Vidal".
Sergio Junoy, dueño del establecimiento y peluquero hace más de 20 años, dijo que "en esta fecha vienen los niños que los trae la mamá, los lolos vienen después porque los devuelven del liceo por pelucones. Los más chiquititos vienen ahora, porque los jóvenes vienen obligados a borrar el tinturado y las rayas que se hacen en el verano", dijo un niño pequeño que se entretenía con autos y animales de juguete que don Sergio tiene en su lugar de trabajo para que dejen cortar el cabello.
Daniela Budín, peluquera en el edificio Richard, explicó que subió entre un 40 y 50% el trabajo estos días, "porque como todo chileno dejamos para última hora todo. Hemos sacado hartas mechas californianas que son las que se hacen en la puntas".
En otro local, Jaime dijo que subió un 60% el trabajo desde el sábado donde diariamente ha realizado entre 25 y 30 cortes. "Lo que más se hace es el mohicano y semi mohicano, los más grandes sólo piden rebajar el volumen. Las profesoras viene a tinturarse".
Paulina, una de las madres que asistió a última hora a la peluquería dijo que estuvo 30 minutos esperando para cortarle el pelo a su hijo que entró a pre kinder: "de los tres meses va al jardín, pero antes no le pedían el pelo corto".
Andrés Fuentes, quien pasó a segundo medio, esperó hasta el último día de vacaciones para cortarse el pelo para aprovechar porque después no lo dejan usarlo largo. Sólo se hizo un rebaje de volumen para que después le sea más fácil dejarlo crecer, "además hice una apuesta con mi primo de dejarnos el pelo largo". J