El peor susto de su vida se llevó una familia ariqueña en la Población Olivarera. Su hijo menor de 17 años ingresó a su casa y se encontró con dos carabineros y un ladrón.
El hecho quedó al descubierto cerca de las 16.30 horas, en una vivienda ubicada en el pasaje Dolores. El fiscal Rodrigo Benitt explicó que un vecino alertó a Carabineros que un hombre ingresó a dicha vivienda, saltándose una reja y forzando un ventanal.
Relató que los uniformados, ante la denuncia, optaron por ingresar a la casa de la misma forma que lo hizo el ladrón. Encontraron al sujeto en el living, con una mochila cuyo interior tenía dos notebooks, un play station, una consola y otras especies.
Los policías también se percataron que el delincuente se tomó el tiempo hasta para revisar los dormitorios. Se desconoce cuánto tiempo se mantuvo al interior del inmueble.
El procedimiento no hubiera pasado de ser otro más en la hoja de ruta de los carabineros, si no hubiera ocurrido lo impensado al intentar salir de la vivienda: se encontraron con que la puerta de la casa y la reja del antejardín se encontraban cerradas con llave.
Al no poder salir del recinto, debieron esperar hasta que llegaran los dueños de la vivienda, para así trasladar finalmente al autor del robo a la comisaría, por lo que tuvieron que "matar el tiempo" un buen rato con el antisocial. De esta manera, los carabineros lograron frustrar el robo, el sujeto fue detenido y puesto a disposición del Tribunal de Garantía.
Ayer, el individuo, identificado como las iniciales C.G.C de 31 años, fue formalizado por el fiscal Benitt por el delito de robo en lugar no habitado y solicitó la cautelar de prisión preventiva, con el argumento que el imputado registra un amplio prontuario policial por el mismo delito y es considerado un peligro para la seguridad de la sociedad.
En tanto, la Defensoría Penal Pública, a cargo del abogado Juan Gallardo, cuestionó que los policías ingresaran a la vivienda sin la autorización de un juez de garantía y que debieron respetar con los protocolos.
El juez Sergio Alvarez, rechazó dicho argumento señalando que los policías ingresaron tras ser alertado que una persona estaba al interior de la vivienda y decretó la cautelar de prisión preventiva y se fijó un plazo de investigación de 60 días.
La hermana del menor, P.G.P., de 23 años, contó que es la segunda vez que ingresan a su casa a robar. La primera vez fue a las 11 de la mañana y el sujetó logró llevarse varias especies de valor.
Dijo que le llama la atención que estos sujetos cometen sus delitos a plena luz del día, en horarios que las personas están trabajando.
"El día del segundo robo llegué cerca de las 17 horas y vi a varias patrullas de Carabineros que tenían cerrado el pasaje. Luego me doy cuenta que un hombre que no conocía estaba gritando como loco al interior de mi casa. Estaba fuera de control dicho sujeto, sin entender lo que estaba sucediendo", recordó P.G.P.
Dijo que su hermano le contó que un ladrón entró a la casa rompiendo una ventana y que incluso se dio el tiempo de realizar un forado en el techo de uno de los dormitorios. Reconoció que como familia están asustados y que van a instalar alarmas y barrotes en las ventanas. La joven se mostró agradecida por la labor que realizaron los efectivos policiales. J