La Pérgola de Las Flores en el Epicentro
En diciembre pasado arribó a Arica la aclamada obra nacional "La Pérgola de las Flores" con un elenco conformado por artistas nacionales (Tomas Vidiella entre ellos) y locales (actores y ballet Integración de la UTA). Como músico, fui testigo de este gran proyecto (toqué batería junto a la Orquesta Andina). Salió todo bien, aunque debo confesar que pudo haber tenido un desenlace diferente. Pareció extraña la elección del Epicentro para la presentación. El ensayo general dejó en evidencia las desfavorables condiciones acústicas que probaron la paciencia de artistas, técnicos y director. La escenografía iba además atrasada y la gala era al día siguiente. ¡¿Y el Municipal?!En fin. Se estaba en cuenta regresiva. El director Alejandro Pinto debió arengar al elenco y apelar a la capacidad del ser humano de superar lo adverso; de obtener la energía de las personas y el entorno; de ser solidario; de enfocarse en la solución por sobre el problema; de unirse en post de un objetivo…Repentinamente, en medio del discurso, se me aparece La Negra Ester…
La Negra se presentó en el Fortín Sotomayor en los 90 con la presencia del mismísimo tío Roberto Parra (me autografió un cassette). Todos los ariqueños sabemos como suena el Fortín, pero pese a todo la presentación fue mágica. Y lo digo como espectador y niño de esa época.
Ya en la presentación, abre el popular "Quiere flores señorita". Francisco Flores Del Campo inquieta por sus variados valses, tonadas, bossa y ritmos latinos. Tonada de Medianoche estremece. En el guión conviven la rebelión, la actividad política, las clases sociales, el poder. ¿Alguna duda de la frescura de esta obra de Isidora Aguirre? ¿Qué le parece que nunca le hayan entregado el Premio Nacional de Arte? En fin. Finaliza la obra y un emocionante aplauso me vuelve a transportar a La Negra y me confirma que las grandes obras se sobreponen a toda circunstancia: guerra, tormenta o terremoto…y eso que ésta fue en pleno epicentro ¡