Contraloría detectó anomalías en la dirección de Obras
Irregularidades que van desde la falta de personal para fiscalizar hasta informes sin toda la información de los proyectos.
Un informe de la Contraloría arrojó una serie de situaciones irregulares ocurridas al interior de la Dirección de Obras Municipales (DOM).
La fiscalización tuvo por objeto efectuar una auditoría a los distintos tipos de permisos de edificación y construcción, otorgados por la Municipalidad de Arica, en el periodo comprendido entre el 1 de enero de 2009 y el 31 de mayo de 2013.
La indagación constató que la DOM no posee un manual de procedimientos referentes a los procesos de recepción, análisis y custodia de los expedientes de proyectos ingresados a esa entidad. Tampoco cuenta con la ficha de control de trámite respecto a solicitudes y entrega de los permisos de edificación. Asimismo se detectó que no contaban con documentos de respaldo y que los informes se encontraban incompletos y no mantenían un orden cronológico.
La auditoría, además reveló que dos funcionarios de la DOM intervinieron y autorizaron permisos. Uno en su calidad de arquitecto y otro como contratista en los proyectos de agua potable y alcantarillado. El informe señala que ambos vulneraron la Ley General de Urbanismo y Construcciones, que prohíbe a los municipales intervenir en los estudios o la ejecución por cuenta de particulares.
El dictamen señala que hasta el nombramiento del director subrogante de la dirección de Obras fue irregular. Se nombró a Gastón Baeza, funcionario de planta, grado 8, quien cumple funciones en la secretaría de Planificación Municipal.
El informe detalla que su nombramiento no corresponde porque no puede intervenir en la formulación y diseño de los proyectos ejecutados por los municipios, vulnerando el principio de probidad administrativa.
Se acreditó la falta de fiscalización a las construcciones autorizadas. La respuesta que entregó la DOM a la Contraloría fue que en varias oportunidades solicitaron al alcalde el aumento en la dotación de profesionales. También quedó al descubierto la falta de capacitación a los funcionarios.
Otras de las irregularidades que se detectaron fue el pago indebido a los derechos municipales y el incumplimiento en los plazos en la presentación de proyectos. La auditoría observó que de los 92 expedientes revisados 53 registros presentaban atrasos en los días de tramitación, correspondientes a permisos de obras nuevas. La Contraloría instruyó un sumario administrativo y dio un plazo hasta el 27 de marzo para que la Municipalidad emita un informe del estado de observaciones.
Dicho informe fue discutido en la última sesión del Concejo. La edil Miriam Arenas responsabilizó a la Contraloría interna de no cumplir con su trabajo de fiscalizar. "En la contraloría interna no disponemos de personal técnico en la materia. Nos falta un profesional del área de la construcción. Hemos solicitado año tras años que nos manden un técnico en construcción para que podamos fiscalizar los estados de pago", explicó Arturo Butrón, contralor municipal.
Por su parte Gastón Baeza, aclaró que al interior de la municipalidad sólo existen tres personas que pueden asumir el cargo de director subrogante. "No hay otro profesional en esta municipalidad que pueda asumir el cargo, tiene que ser arquitecto. Estando como director de Obras he tenido que aprobar mis propios proyectos municipales. Me ha tocado ser el arquitecto proyectista; el arquitecto revisor, el director de Obras y a veces hasta el inspector de la obras. Indudablemente eso es cuestionable, pero va en beneficio de la comunidad y de la propia municipalidad para no perder los recursos, uno toma las decisiones y sigue adelante", sostuvo.
Agregó que se necesita urgente que nombren a un director titular, ya que Francisco Zuleta en abril de 2013 presentó su renuncia. J