Frenar la delincuencia juvenil
En los últimos días, una serie de hechos delictuales que se han registrado en Arica tienen un común denominador: sus protagonistas son menores de edad.
Apenas han transcurrido siete días del año 2014 y en este corto periodo varios han sido los hechos policiales en los que se han visto involucrados menores de 18 años.
El jueves pasado, dos hermanas, de 14 y 16 años, junto a un menor de 13 años, fueron detenidos luego de asaltar y golpear a un adulto mayor de 67 años, que padece de Parkinson. En este caso, el niño quedó en libertad, porque por su edad es inimputable ante la ley; y las hermanas fueron dejadas en libertad, pero formalizadas por el delito de homicidio frustrado.
El fin de semana pasado, cinco menores fueron detenidos en un control rutinario de Carabineros, luego de comprobarse que el vehículo en el que viajaban por la costanera sur había sido sustraído desde la población Saucache. Dentro del móvil encontraron tijeras y una pistola hechiza. Durante esa misma jornada, otros tres menores formaban parte de una banda liderada por una mujer de 25 años, que robaban autos en el sector de Pampa Nueva.
La ciudadanía ha manifestado a través de las redes sociales su preocupación por el aumento de los delitos en que los menores son quienes perpetran robos, asaltos y otros delitos. Y esa preocupación se transforma en rabia, porque la mayoría de las veces los adolescentes quedan en libertad y sujetos a medidas cautelares, como la firma mensual o la prohibición de acercarse a las víctimas.
El flagelo de la delincuencia juvenil debe ser enfrentado por la sociedad en su conjunto. No sólo endosarle al Estado la responsabilidad por los delitos cometidos por los menores y la aplicación de condenas más efectivas; es la familia la que debe hacer un trabajo formador que lleve a los niños y adolescentes a alejarse de la comisión de delitos ¿Cómo? Creando más espacios para la práctica de deporte; y tener más opciones o alternativas de rehabilitación efectiva.
Todos somos responsables de los menores. Es una tarea pendiente que tenemos como sociedad.