El nuevo gobierno regional, encabezado por Emilio Rodríguez Ponce, enfrentará enormes desafíos, sobre todo en aquellas materias que deben consolidarse para potenciar el crecimiento de la zona.

Tras la creación de la Región de Arica y Parinacota pasaron dos administraciones y tres intendentes, quienes desde distintas perspectivas fueron construyendo las bases para que la denominada "Puerta Norte" dé el paso definitivo hacia el desarrollo.

Durante el último gobierno se logró revertir el decrecimiento regional y se alcanzaron cifras económicas positivas; en efecto, el desempleo disminuyó de manera considerable y durante el año 2013 se alcanzó un crecimiento acumulado de 5,8 por ciento. Sin embargo y pese a estos números, la población continúa evidenciando un sentimiento de postergación, el que posiblemente se ve incrementado por el nivel de progreso que actualmente muestran ciudades como Antofagasta, Iquique y Tacna.

En la edición de ayer de este Diario, distintos actores sociales dieron a conocer cuáles son las demandas de la comunidad. Si bien existen aspectos particulares que responden a los intereses de cada gremio, lo cierto es que se observa la necesidad de incrementar la inversión en infraestructura pública. En ese sentido, es importante recordar que hace mucho tiempo que se viene hablando del mejoramiento del borde costero, de la construcción de los embalses, de un barrio cívico que albergue al Gobierno Regional y otros servicios públicos, de la creación de un nuevo puerto en el sector norte, de la instalación de una planta desaladora y de tantos otros proyectos que se han ido quedando en las carpetas de las distintas administraciones regionales.

Esto, sumado a una eficiente política de estado para la región, podría ayudar a revertir un estancamiento que por décadas han denunciado ariqueños y parinacotenses.

El nuevo gobierno, los parlamentarios de la zona y los consejeros regionales tienen la oportunidad de responder a estas demandas y generar el despegue definitivo de una región que por su ubicación geográfica merece un trato especial de un país que debe mirar hacia las regiones.